/ viernes 15 de diciembre de 2023

Mexicano, te habla la verdadera historia de México (parte 32)

LA REVOLUCIÓN MEXICANA, PATROCINADORES GRINGOS, CAUDILLOS CRIMINALES, HÉROES ACTUALES. PARTE 4

En nuestro artículo anterior, analizamos la profundidad de la entrevista del periodista de Estados Unidos Creelman con el presidente Porfirio Díaz, dos años antes de su caída. En 1909 en octubre, se encontraron Porfirio Díaz y Howard Tafft por primera ocasión los dos presidentes de México y Estados Unidos, en El Paso Texas y en Ciudad Juárez. Esta entrevista tuvo una amplia cobertura por toda la prensa independiente y sometida, ellos veían que se presentaría un alto grado de cordialidad en las relaciones de ambos países. Uno de los periódicos más críticos de entonces, “El diario del hogar”, consideraba que este acercamiento con el vecino país, tan ambicioso e intervencionista era riesgoso para la soberanía nacional, tomando en consideración la política exterior de Estados Unidos y la fragilidad de la política interna de México. Este periódico en la mayoría de sus editoriales estuvo analizando y criticando los riesgos de esta entrevista, sabiendo que serian analizados por el reducido grupo de lectores de cierta cultura y que estaban acostumbrados a leer. El Diario del Hogar, era el de moda de mayor circulación, fundado en 1881 por Filomeno Mata, al inicio tuvo un buen acercamiento con el gobierno de Díaz, pero posteriormente, por las reelecciones del presidente se tornó un crítico agudo del mandatario, lo anterior provocó que en diversas ocasiones cerraran a este rotativo y el encarcelamiento de su director. Entre sus proyectos periodísticos, Filomeno Mata, fomentaba que era necesaria la participación ciudadana, por lo que este periódico fue identificado eminentemente político, criticando fuertemente las reelecciones de Porfirio Díaz. La ciudad de México entonces tenía una población cercana a 470 mil habitantes, aunque el tiraje de este periódico no pasaba de mil ejemplares, su política era antiestadounidense y este diario inicia con el lema de “Sufragio efectivo-no reelección”, lema que posteriormente lo toma Francisco I. Madero y los grupos de oposición a Porfirio Díaz, en esta efervescencia política, y con la sucesión presidencial surgen partidos políticos y clubes en un ambiente polarizado, entre porfiristas y opositores, por lo que entre sus discusiones estaba incluida obviamente, la entrevista Díaz – Tafft y sus posibles consecuencias. Los temas que abordarían los ejecutivos eran pláticas de café y de grupos políticos. En los medios políticos, se confirmaba que esta entrevista era una iniciativa del gobierno de Washington, por lo cual alimentaba una suspicacia de los propósitos de tal reunión. Todas estas conjeturas desembocaban en la conclusión de que el real propósito de Tafft no era saludar a Díaz, si no abordar asuntos de su interés nacional sobre los países vecinos del sur, entre ellos los conflictos que se presentaban en Cuba y Nicaragua. El contenido de las invitaciones hablaba de buena vecindad y cordialidad. Este rotativo, El Diario del Hogar, entre sus conclusiones sobre esta entrevista, alegaban que la realidad era no un cordial saludo, si no que ellos necesitaban a México como aliado en Centroamérica, donde tenían grandes intereses en la zona del canal, así también la creencia que si Díaz no accedía a todas las peticiones de Tafft, se vendrían serias repercusiones contra el Gobierno de Porfirio Díaz, se confirmó que la entrevista sería el 16 de octubre en el Paso Texas a las 9:30 de la mañana y horas después, la segunda parte de la entrevista sería en Ciudad Juárez. Aunque el periódico insistía sobre los temas que ellos suponían la cancillería mexicana siempre lo estuvo negando. El día que por fin llegó, 16 de octubre de 1909, ambas ciudades fronterizas se prepararon para celebrar este evento con una fiesta popular, al iniciar la entrevista todo parecía cordialidad y diplomacia, sin embargo, paulatinamente se fue haciendo de un ambiente difícil.

Continuaremos con esta entrevista, en el próximo artículo.

LA REVOLUCIÓN MEXICANA, PATROCINADORES GRINGOS, CAUDILLOS CRIMINALES, HÉROES ACTUALES. PARTE 4

En nuestro artículo anterior, analizamos la profundidad de la entrevista del periodista de Estados Unidos Creelman con el presidente Porfirio Díaz, dos años antes de su caída. En 1909 en octubre, se encontraron Porfirio Díaz y Howard Tafft por primera ocasión los dos presidentes de México y Estados Unidos, en El Paso Texas y en Ciudad Juárez. Esta entrevista tuvo una amplia cobertura por toda la prensa independiente y sometida, ellos veían que se presentaría un alto grado de cordialidad en las relaciones de ambos países. Uno de los periódicos más críticos de entonces, “El diario del hogar”, consideraba que este acercamiento con el vecino país, tan ambicioso e intervencionista era riesgoso para la soberanía nacional, tomando en consideración la política exterior de Estados Unidos y la fragilidad de la política interna de México. Este periódico en la mayoría de sus editoriales estuvo analizando y criticando los riesgos de esta entrevista, sabiendo que serian analizados por el reducido grupo de lectores de cierta cultura y que estaban acostumbrados a leer. El Diario del Hogar, era el de moda de mayor circulación, fundado en 1881 por Filomeno Mata, al inicio tuvo un buen acercamiento con el gobierno de Díaz, pero posteriormente, por las reelecciones del presidente se tornó un crítico agudo del mandatario, lo anterior provocó que en diversas ocasiones cerraran a este rotativo y el encarcelamiento de su director. Entre sus proyectos periodísticos, Filomeno Mata, fomentaba que era necesaria la participación ciudadana, por lo que este periódico fue identificado eminentemente político, criticando fuertemente las reelecciones de Porfirio Díaz. La ciudad de México entonces tenía una población cercana a 470 mil habitantes, aunque el tiraje de este periódico no pasaba de mil ejemplares, su política era antiestadounidense y este diario inicia con el lema de “Sufragio efectivo-no reelección”, lema que posteriormente lo toma Francisco I. Madero y los grupos de oposición a Porfirio Díaz, en esta efervescencia política, y con la sucesión presidencial surgen partidos políticos y clubes en un ambiente polarizado, entre porfiristas y opositores, por lo que entre sus discusiones estaba incluida obviamente, la entrevista Díaz – Tafft y sus posibles consecuencias. Los temas que abordarían los ejecutivos eran pláticas de café y de grupos políticos. En los medios políticos, se confirmaba que esta entrevista era una iniciativa del gobierno de Washington, por lo cual alimentaba una suspicacia de los propósitos de tal reunión. Todas estas conjeturas desembocaban en la conclusión de que el real propósito de Tafft no era saludar a Díaz, si no abordar asuntos de su interés nacional sobre los países vecinos del sur, entre ellos los conflictos que se presentaban en Cuba y Nicaragua. El contenido de las invitaciones hablaba de buena vecindad y cordialidad. Este rotativo, El Diario del Hogar, entre sus conclusiones sobre esta entrevista, alegaban que la realidad era no un cordial saludo, si no que ellos necesitaban a México como aliado en Centroamérica, donde tenían grandes intereses en la zona del canal, así también la creencia que si Díaz no accedía a todas las peticiones de Tafft, se vendrían serias repercusiones contra el Gobierno de Porfirio Díaz, se confirmó que la entrevista sería el 16 de octubre en el Paso Texas a las 9:30 de la mañana y horas después, la segunda parte de la entrevista sería en Ciudad Juárez. Aunque el periódico insistía sobre los temas que ellos suponían la cancillería mexicana siempre lo estuvo negando. El día que por fin llegó, 16 de octubre de 1909, ambas ciudades fronterizas se prepararon para celebrar este evento con una fiesta popular, al iniciar la entrevista todo parecía cordialidad y diplomacia, sin embargo, paulatinamente se fue haciendo de un ambiente difícil.

Continuaremos con esta entrevista, en el próximo artículo.