Dentro del primer sector de la ciudad de Torreón, un grupo de viviendas destaca entre el paisaje urbano, revelando una arquitectura única que contrasta con la modernidad y expansión de la ciudad. En este contexto, una residencia en particular ha atraído la atención de los transeúntes, no solo por su distintivo diseño, sino también por una inscripción que corona su fachada, marcando el año 1943.
La incógnita sobre el significado de este año y la historia detrás de esta casa ha despertado la curiosidad de muchos. Aquí te contamos lo que se sabe hasta ahora.
La usuaria de Facebook Anny Montygomz compartió, a principios de noviembre, una serie de fotografías de esta casa en el grupo “Torreón y La Laguna ¡Vive la Historia!”. Su publicación iba acompañada por el siguiente mensaje: “Hoy vi esta casa en la colonia, me gustó la fachada con sus detalles torreonenses. En una columna tiene una fecha de 1943. No sé si alguien de ustedes sabe la historia, si viven ahí o si es un local comercial”.
Los comentarios que siguieron revelaron fragmentos de la historia de este lugar. Aunque gran parte de estos relatos se basan en recuerdos transmitidos a lo largo de los años, contribuyen a rescatar del olvido estos relatos, enriqueciendo la cultura de la ciudad.
Según los testimonios, esta residencia, situada en la calzada Colón, entre las calles Bravo y Corregidora, justo antes del bulevar Independencia, ha sido desde siempre una vivienda particular que ya cuenta con varias décadas de existencia. La familia Vilas, inmigrantes españoles que llegaron a la región lagunera a principios de la década de 1940, serían los propietarios originales, como indica la inscripción en su entrada con el año 1943.
Uno de los miembros más destacados y recordados de la familia Vilas fue José Manuel Vila, médico de profesión, pero sobre todo reconocido por su papel en uno de los bares más emblemáticos de la región, Las Dos Naciones. Este establecimiento se ganó un lugar en la historia como una de las cantinas más veneradas de Torreón.
Un artículo del Museo Arocena describe el lugar como "una de las cantinas legendarias de Torreón", que cambió de nombre en años recientes a "La Tradicional". Con la dirección del señor José Manuel Vila, trabajaron cantineros famosos que más tarde establecieron sus propios locales, como Don Bernabé Torre del Salón Versalles, Enrique Torre de la Cantina Club España, y Ciriaco Zorrilla del Salón Ciriaco. Este legado continúa resonando en la memoria colectiva de la región lagunera.
