/ jueves 7 de septiembre de 2023

Martín Dihigo, el pitcher de Laguna que jugó las nueve posiciones del diamante

Dihigo es el único que ha ganado en dos ocasiones la triple corona de pitcheo

En la temporada de 1942, los Algodoneros del Unión Laguna se coronaron campeones por primera vez en la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) y lo hizo con un equipo fuerte y lleno de estrellas; estaba comandado por Martín Dihigo, quien además era jugador.

El año previo al título (1941), fue el mejor en el pitcheo y se adjudicó la triple corona; es el único que ha conseguido esta hazaña que consiste en ser líder en promedio de bateo, cuadrangulares conectados y carreras impulsadas; Dihigo ha sido el único lanzador que además tiene la marca de lograrlo en dos ocasiones.

Fue líder de efectividad con 2.53, el primero en ganados y perdidos con 22-7 para un .759 de porcentaje, también líder en ponches con 211. Dihigo es el único que ha ganado en dos ocasiones la triple corona de pitcheo.

Fue un 25 de mayo en el año 1905 cuando en Matanzas, Cuba nace Martín Dihigo Llanos, sin saber que estaba naciendo una de las estrellas históricas del Rey de los Deportes. Su padre fue Benito Dihigo, un hombre trabajador que desde pequeño abandonó el sexto grado de primaria para comenzar la labor en los ingenios azucareros de aquella región, para luego convertirse en militar y luchar por la independencia de su país en 1898.

Un jugador fuera de serie

Martín comenzó a jugar béisbol desde los 12 años e ingresó a las ligas juveniles de Cuba. Debutó en 1922 en la novena llamada Havana Reds; tuvo poca participación pero comenzó a foguearse para convertirse en el mejor bateador.

Pasó a las Ligas Negras de Estados Unidos donde de inmediato se convirtió en una figura; su inicio fue con los Cuban Stars como primera base y estuvo en otros equipos, de 1923 a 1936 y un tiempo en 1945.

Sin embargo, tuvo que atravesar en ese tiempo por una situación de discriminación racial muy fuerte en la que se exponían a malos tratos de la gente, condiciones precarias e insalubres debido a todas las prohibiciones que se tenían para las personas de color en los Estados Unidos.

La situación cambió cuando salió del país de las barras y las estrellas; esta situación lo llevó a buscar un lugar para jugar en otros países, tales como República Dominicana, Venezuela y México.

Martin Dihigo llegó a la Liga Mexicana de Beisbol en 1937, fue uno de los peloteros más destacados de las Ligas Negras; destacó por jugar todas las posiciones en el campo y también es considerado el más completo de América Latina. Dejó una marca de 119 juegos ganados y 57 perdidos, en un total de 11 temporadas.

Su mejor temporada en la Liga Mexicana fue en 1938 con el equipo de los Rojos del Águila de Veracruz, mientras se desarrollaba la Segunda Guerra Mundial; logró hacer campeón al equipo jarocho con los mejores récords de bateo, carreras limpias y ponches.

Se le consideró un jugador fuera de serie, fue entrenador, manager e incluso comentarista de radio en Cuba, por lo que se le considera una persona versátil y con un cúmulo de cualidades, principalmente deportivas.

También el mejor jugador de todos los tiempos; en la historia se recuerda como uno de los más destacados que han pasado por los Algodoneros de Unión Laguna: jugó, entrenó y dirigió el equipo y fue el manager que lo llevó al primero de los dos campeonatos que tiene, en los 80 años de historia del equipo, en la temporada de 1942.

Su físico era impactante, medía 1.93 metros y pesaba 100 kilogramos de peso, se presume que tenía una figura atlética y muchas habilidades; fue además el jugador que hizo el primer juego perfecto en la historia del beisbol mexicano.

El manager que pasó a la historia

Un año antes del campeonato llegó Dihigo a La Laguna cuando ya estaba en marcha la temporada; vino a sustituir a Melo Almada, que fue el primer mexicano en llegar a las Ligas Mayores. El equipo se reforzó para tener un infield con el ‘Oso’ Montalvo en primera y Martín también jugó varias veces en la inicial; Laureano Camacho en segunda base, Ramón Lagunas ‘Lagunitas’ en el short y el cubano Lolo Correa en la antesala.

En dicha temporada y otras posteriores, Jesús ‘Chanquilón’ Díaz, fue el Novato del Año, toda una estrella de la Liga Mexicana jugando en jardín izquierdo; además, Martñin Dihigo contó en ese tiempo con el bateador cubano Alejandro ‘Filete’ Crespo en el central y en el derecho Memo Garibay, que en el año de 1950 llevara otra vez a la gloria del campeonato a los Algodoneros.

Pasó cuatro temporadas con el Unión Laguna como jugador, entrenador y manager; ya venía de una lesión que le aquejaba y tenía 35 años de edad, pero su brazo afectado no le impidió dar lo mejor durante ese temporada de 1942, en la que volvió a adjudicarse la triple corona de lanzador.

Martín Dihigo Llanos pasó sus últimos días en Cienfuegos, Cuba; murió de un infarto cerebral 5 días antes de cumplir los 66 años, un 20 de mayo de 1971. En 1977 ingresó al Salón de la Fama en Cooperstown, New York, al de Cuba, así como al de México, República Dominicana y Venezuela. En su país se le conoce como ‘El Inmortal’ y en México como ‘El Maestro’.

En la temporada de 1942, los Algodoneros del Unión Laguna se coronaron campeones por primera vez en la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) y lo hizo con un equipo fuerte y lleno de estrellas; estaba comandado por Martín Dihigo, quien además era jugador.

El año previo al título (1941), fue el mejor en el pitcheo y se adjudicó la triple corona; es el único que ha conseguido esta hazaña que consiste en ser líder en promedio de bateo, cuadrangulares conectados y carreras impulsadas; Dihigo ha sido el único lanzador que además tiene la marca de lograrlo en dos ocasiones.

Fue líder de efectividad con 2.53, el primero en ganados y perdidos con 22-7 para un .759 de porcentaje, también líder en ponches con 211. Dihigo es el único que ha ganado en dos ocasiones la triple corona de pitcheo.

Fue un 25 de mayo en el año 1905 cuando en Matanzas, Cuba nace Martín Dihigo Llanos, sin saber que estaba naciendo una de las estrellas históricas del Rey de los Deportes. Su padre fue Benito Dihigo, un hombre trabajador que desde pequeño abandonó el sexto grado de primaria para comenzar la labor en los ingenios azucareros de aquella región, para luego convertirse en militar y luchar por la independencia de su país en 1898.

Un jugador fuera de serie

Martín comenzó a jugar béisbol desde los 12 años e ingresó a las ligas juveniles de Cuba. Debutó en 1922 en la novena llamada Havana Reds; tuvo poca participación pero comenzó a foguearse para convertirse en el mejor bateador.

Pasó a las Ligas Negras de Estados Unidos donde de inmediato se convirtió en una figura; su inicio fue con los Cuban Stars como primera base y estuvo en otros equipos, de 1923 a 1936 y un tiempo en 1945.

Sin embargo, tuvo que atravesar en ese tiempo por una situación de discriminación racial muy fuerte en la que se exponían a malos tratos de la gente, condiciones precarias e insalubres debido a todas las prohibiciones que se tenían para las personas de color en los Estados Unidos.

La situación cambió cuando salió del país de las barras y las estrellas; esta situación lo llevó a buscar un lugar para jugar en otros países, tales como República Dominicana, Venezuela y México.

Martin Dihigo llegó a la Liga Mexicana de Beisbol en 1937, fue uno de los peloteros más destacados de las Ligas Negras; destacó por jugar todas las posiciones en el campo y también es considerado el más completo de América Latina. Dejó una marca de 119 juegos ganados y 57 perdidos, en un total de 11 temporadas.

Su mejor temporada en la Liga Mexicana fue en 1938 con el equipo de los Rojos del Águila de Veracruz, mientras se desarrollaba la Segunda Guerra Mundial; logró hacer campeón al equipo jarocho con los mejores récords de bateo, carreras limpias y ponches.

Se le consideró un jugador fuera de serie, fue entrenador, manager e incluso comentarista de radio en Cuba, por lo que se le considera una persona versátil y con un cúmulo de cualidades, principalmente deportivas.

También el mejor jugador de todos los tiempos; en la historia se recuerda como uno de los más destacados que han pasado por los Algodoneros de Unión Laguna: jugó, entrenó y dirigió el equipo y fue el manager que lo llevó al primero de los dos campeonatos que tiene, en los 80 años de historia del equipo, en la temporada de 1942.

Su físico era impactante, medía 1.93 metros y pesaba 100 kilogramos de peso, se presume que tenía una figura atlética y muchas habilidades; fue además el jugador que hizo el primer juego perfecto en la historia del beisbol mexicano.

El manager que pasó a la historia

Un año antes del campeonato llegó Dihigo a La Laguna cuando ya estaba en marcha la temporada; vino a sustituir a Melo Almada, que fue el primer mexicano en llegar a las Ligas Mayores. El equipo se reforzó para tener un infield con el ‘Oso’ Montalvo en primera y Martín también jugó varias veces en la inicial; Laureano Camacho en segunda base, Ramón Lagunas ‘Lagunitas’ en el short y el cubano Lolo Correa en la antesala.

En dicha temporada y otras posteriores, Jesús ‘Chanquilón’ Díaz, fue el Novato del Año, toda una estrella de la Liga Mexicana jugando en jardín izquierdo; además, Martñin Dihigo contó en ese tiempo con el bateador cubano Alejandro ‘Filete’ Crespo en el central y en el derecho Memo Garibay, que en el año de 1950 llevara otra vez a la gloria del campeonato a los Algodoneros.

Pasó cuatro temporadas con el Unión Laguna como jugador, entrenador y manager; ya venía de una lesión que le aquejaba y tenía 35 años de edad, pero su brazo afectado no le impidió dar lo mejor durante ese temporada de 1942, en la que volvió a adjudicarse la triple corona de lanzador.

Martín Dihigo Llanos pasó sus últimos días en Cienfuegos, Cuba; murió de un infarto cerebral 5 días antes de cumplir los 66 años, un 20 de mayo de 1971. En 1977 ingresó al Salón de la Fama en Cooperstown, New York, al de Cuba, así como al de México, República Dominicana y Venezuela. En su país se le conoce como ‘El Inmortal’ y en México como ‘El Maestro’.

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