La Laguna. – La noche del miércoles, a las 22:30 horas, autoridades de Lerdo recibieron el aviso que en el Hospital General un niño, de tan solo siete años de edad, había muerto luego de sufrir un accidente vehicular.
Al lugar, acudieron agentes de la Policía Investigadora de Delitos (PID), en compañía de personal de Servicios Periciales y la agente del Ministerio Público (MP) adscrita a la Unidad especializada en delitos de Homicidios.
Constataron que en el área del mortuorio se encontraba el cuerpo sin vida de un menor, quien respondiera al nombre de Jorge Arturo.
Tenía su domicilio en el ejido Cuatillos del municipio de Cuencamé, Durango.
De acuerdo con las primeras investigaciones, eran alrededor de las 21:40 horas cuando el niño estaba con sus familiares en Nazas, en donde están las letras de ese municipio, en un taller mecánico.
“Por lo que al intentar cruzar la calle el menor, para ir a las letras, fue impactado por una ambulancia, desconociendo más características de la misma ya que esta siguió su camino”.
Al respecto, Mónica del Rocío, mamá de Jorge Arturo, lo trasladó a recibir atención médica al Hospital Integral de Nazas y derivado a la gravedad de las lesiones, fue llevado al Hospital General de Lerdo, ingresando sin signos vitales.
