Torreón, Coahuila.- Tras narrar en una cronología la manera en la que transcurrieron los hechos desde la desaparición del alcalde Guerrero, Mario Cedillo, hasta que afortunadamente fue localizado junto con quienes lo acompañaban, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís agradeció públicamente la respuesta que para atender este caso encontró de inmediato de parte de las autoridades federales y del gobierno del vecino estado de Tamaulipas, y dio a conocer que toda la información que se logrado reunir luego de una serie de diligencias, irá a complementar la carpeta de investigación que sigue su curso para el esclarecimiento de lo ocurrido, a fin de poder castigar a los responsables.
“Quisiera desde aquí agradecer la intervención del Ejército Mexicano, de la Marina, del Gobierno del Estado de Tamaulipas y la coordinación que de manera personal dio el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López, con quien me comuniqué y de manera inmediata inició la coordinación de los operativos correspondientes para el rescate de estos 10 funcionarios públicos del municipio de Guerrero”, declaró en rueda de prensa el mandatario coahuilense.
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Dejó en claro que la desaparición de Cedillo y sus acompañantes, registrada el pasado viernes cerca de la media noche, sucedió fuera del territorio coahuilense, en el estado de Tamaulipas, cuando viajaban del aeropuerto de Nuevo León con destino a Guerrero al optar por ello por la ruta más corta, a través de Nuevo Laredo, esto después de haber asistido al Tianguis Turístico que se celebró en Oaxaca.
ASÍ FUE LA DESAPARICIÓN DEL ALCALDE DE GUERRERO, COAHUILA
Sobre el detalle de los hechos que le fueron reportados con toda oportunidad, detalló que a las 11 de la noche del viernes 14 de octubre se registró una última llamada telefónica entre uno de los viajeros y su familia, en la que daba cuenta que eran perseguidos por vehículos tripulados por personas armadas, y a partir de ahí se perdió toda comunicación luego de que evidentemente todos apagaron sus celulares, como lo reportó a las autoridades la Dirección Jurídico del Ayuntamiento de Guerrero a la 1:45 de la mañana hace contacto con autoridades estatales, por lo que a las dos de la mañana le avisan al gobernador notificando los hechos, luego de que se había perdido comunicación, para las 12.
De acuerdo con el Gobernador, como resultado del trabajo de inteligencia del gobierno del Estado se identifica la última ubicación que marcaron los teléfonos celulares antes de ser apagados y se emite el reporte al C5 de Tamaulipas, y una hora más tarde se logra establecer contacto entre las autoridades estatales de ambas entidades y también con autoridades militares con presencia en la zona.
A las seis de la mañana personal de los cuerpos de seguridad ciudadana y de reacción de Coahuila se trasladan a Piedras Negras para establecer acciones e los límites territoriales de los dos Estados y para el mediodía se realiza una reunión con los presidentes municipales del Norte de Coahuila para establecer medidas de seguridad. Además, se reúnen el Fiscal General de Coahuila, Gerardo Márquez y la Secretaria de Seguridad Pública en la entidad, Sonia Villarreal con el general Fausto Torres, Titular de la Zona Militar número 47 para analizar la situación y coordinar el “barrido” en las dos entidades.
Finalmente, a las 14:25 horas en las inmediaciones del periférico de Nuevo Laredo se logra ubicar los vehículos en los que se encontraban el alcalde y sus acompañantes, y se integra un convoy de cerca de 60 unidades terrestres y dos helicópteros, a fin de trasladarlos al municipio de Guerrero, donde al llegar, a las 17:00 horas fueron atendidos por personal médico y psicólogos que los certificaron y reportaron fuera de peligro, donde solamente presentaron marcas en sus manos de ataduras, para después fueron entrevistados por personal de la Fiscalía estatal.
