Una de las drogas más antiguas del mundo y de uso más común en la actualidad es el cannabis, se asocia a efectos relajantes, anestésicos y es buscada para el manejo de estrés. También produce ciertos efectos de euforia: aumenta las sensaciones, intensifica la percepción de los sentidos y estos dos efectos son justo los que la han hecho tan popular.
El consumo de ésta se ha promovido y difundido como una droga mixta; quiere decir que tiene diferentes efectos de acuerdo a cada organismo, la cantidad e incluso la vía de administración. Actúa de manera distinta de acuerdo al peso, talla de cada persona pero también influye mucho la cantidad que se consume.
En el municipio de Torreón, el 55 por ciento de las personas que se atienden por algún tipo de adicción se encuentran entre los 13 y 19 años de edad, de los 20 a los 30 son alrededor de un 17 por ciento y de 30 en adelante son cerca de un 25 por ciento.
El sector más vulnerable son los adolescentes y algunos son solo consumidores experimentales o sociales pero otros ya son dependientes; sin embargo, es fundamental detectar y tomar acción desde los primeros consumos y evitar que caigan en adicciones más fuertes y que vayan escalando de las drogas legales, a las de entrada y finalmente a las sintéticas.
¿Qué son las drogas de entrada?
Hay sustancias como el alcohol y el tabaco que también son drogas, pero están catalogadas como legales; sin embargo se encuentran entre las principales en abrir la puerta al uso de otras sustancias ilegales; la marihuana o cannabis es otra de estas sustancias, que si bien no es legal, es una de las de mayor uso por quienes inician en el consumo de estupefacientes y es considerada también como de entrada.
Es una sustancia que genera tolerancia, es decir, que a pesar de que se aumente la cantidad de consumo, los efectos van disminuyendo. “Muchos de los brincos que los consumidores han dado a drogas sintéticas o de diseño se han hecho bajo los efectos de esta droga", indicó Cecilia Martínez, directora del Centro de Integración Juvenil (CIJ) en Torreón.
De los usuarios que acuden al CIJ por consumo de sustancias, alrededor del 50 por ciento son consumidores de marihuana, ya sea experimentadores o funcionales. No todos han probado drogas sintéticas o de diseño, pero de todos los que llegan por el uso de éstas, sí fueron usuarios de cannabis.
Una baja percepción de riesgo
Las drogas legales como el alcohol y el tabaco tienen restricciones y el hecho de ser legales no es sinónimo de uso libre; son para mayores de edad, para organismos sanos y debe haber límite en el consumo .
En el caso del alcohol se debe tener un consumo moderado, controlado aunque mucha gente no lo respeta y hace uso indebido; en el caso del tabaco aunque sea legal no tiene ningún beneficio al consumirlo, provoca el mayor número de muertes prevenibles en el mundo. Incluso el potencial adictivo del tabaco es equivalente al de la cocaína o la heroína.
"Es una cuestión de educación para la salud, también de regulación porque todavía falta un mayor y mejor control sobre la venta se estás drogas legales que muchas veces terminan llegando a adolescentes y con éstas, empiezan consumo de drogas a edades tempranas, que sin duda pueden abrir la puerta a drogas ilegales", comentó la directora.
Esto es lo que se conoce como la baja percepción del riesgo y que no se toma en cuenta la consecuencia tanto en la cuestión adictiva como en los daños orgánicos que pueden provocar este tipo de drogas en quienes las consumen.
La prevención es la clave anti adicciones
La difusión de información es una de las principales estrategias para llegar cada vez a más personas y que en escuelas, con los maestros, en el sector salud o hacia la comunidad se deben multiplicar los trabajos de información como pláticas, pero sobre todo con la población que está en mayor riesgo para poder darles elementos y puedan tomar las decisiones adecuadas.
Así lo explicó la directora del centro para el tratamiento de las adicciones, quien además agregó que otros puntos muy importantes son promover convivencias familiares armónicas, estilos de vida saludables, apegos a la escuela y al trabajo, entre otros. Estos factores protegen a las personas y es todo un conjunto de herramientas que se deben conjuntar para tener resultados positivos.
En los diferentes entornos se necesita un mayor acercamiento con el cual proporcionar información y promover estos puntos importantes, para evitar que la gente caiga en el consumo de sustancias, ya que no solo en escuelas se debe trabajar, también en comunidades e incluso empresas y centros laborales que son espacios que también deben estar libres de contaminación emocional, de drogas y adicciones.
¿Cómo se trata una adicción?
Cuando se detecta un caso de adicción primero se debe realizar una valoración; las personas que van a someterse a cualquier tipo de tratamiento o programa deben tener la intención de hacer el cambio y presentarse de manera voluntaria, aunque en ocasiones hay concertaciones con diferentes instancias en las que pueden acudir pacientes condicionados, ya sea por ámbitos legales, laborales o escolares.
Se debe de trabajar con un equipo de especialistas en adicciones y debe ser de manera multidisciplinaria; se valoran desde el área de Trabajo Social, la historia clínica y el servicio de valoración psicológica para determinar el tipo de programa que necesite llevar a cabo cada paso particular.
En el caso del Centro de Integración Juvenil hay consulta externa con terapias individuales, familiares y grupales en los que las personas acuden a cada sesión y continúan integrados en sus actividades normales, acuden cada semana o 15 días y puede durar de 6 meses a un año el tratamiento.
Hay modelos de Centros de Día con medio internamiento en el que permanecen 6 horas al día, en la que se atiende a pacientes que ya tienen mayor severidad en el consumo y que ya no están laborando o estudiando a causa de su problema de consumo; permanecen 4 meses con la realización de diferentes actividades grupales y terapéuticos, cuando cumplan los objetivos y se reintegren a sus actividades cotidianas, pueden continuar bajo la modalidad de consulta externa.
Finalmente, hay un modelo de atención para casos que ya requieren alejarse del entorno y se internan de manera permanente durante un mínimo de 3 meses; en Torreón no se cuenta con el hospital para internamiento, pero los pacientes en esta situación son canalizados a la unidad más cercana que se encuentra en la ciudad de Monterrey.
Riesgos principales de las drogas
Son diferentes los riesgos de consumir diferentes sustancias psicoactivas y según la Organización Panamericana de la Salud (OPS) éstas actúan sobre el sistema nervioso y generan alteraciones en funciones reguladoras de los pensamientos, emociones e incluso el comportamiento.
Indica también que el consumo de drogas siempre conlleva un grado de riesgo importante de sufrir consecuencias adversas principalmente en sobre órganos y sistemas; a corto plazo puede causar intoxicación, con la cual se incrementa el riesgo de accidentes o agresión, así como conductas sexuales en condiciones inseguras.
El uso repetido y prolongado de este tipo de sustancias, favorece el desarrollo de ciertos trastornos por dependencia, mismos que pueden llegar a ser crónicos y recurrentes; generarán necesidad intensa de la sustancia y la pérdida de la capacidad para controlar el consumo.
