Marcela Gorgón Carrillo es una mujer como cualquier otra, esposa, madre, abuela, hija y amiga. Nos platica cuando la abordamos para hablar de la Conmemoración Internacional del Día de la Mujer.
De carácter afable, seria, reservada nos comenta que ella es como muchas otras mujeres, “Soy una persona que viene de la cultura del esfuerzo y que está segura de que el amor, la constancia y la solidaridad, nos hacen mejores personas y ello nos da la paz interior y con ella, la felicidad”.
Hija de la señora Emma Carrillo Nájera y del Señor Ernesto Gorgón Cerda, hermana de Ernesto y Moisés. Y mamá de Marcela Graciela y Marcela Alejandra bendiciones que llegaron a su vida a lado de su esposo y amor de su vida, Miguel Ángel.
Para ella la conmemoración del Día Internacional de la Mujer es una forma de respeto y reconocimiento para dar el valor real de las mujeres. “Creo que no debe ser un día en particular, más bien debe ser una forma de vida. Que todos los días, nosotras mismas como mujeres, nos demos el lugar que merecemos. Que seamos las primeras en respetarnos, en reconocer que tenemos el derecho de la igualdad y valorarnos a sí mismas. Si nosotras empezamos por hacerlo, los hombres también lo harán”.
Se dice afortunada de tener una vida feliz, plena y sobre todo, de lucha. “Tengo la fortuna de haber sido forjada en los valores. Desde pequeña, mis padres me enseñaron a quererme, a trabajar y a que si la vida me sonríe, debo compartir y trabajar por los demás”.
Asegura que esos valores tomaron fuerza cuando fue presidenta honoraria del DIF en Torreón y ahora que preside el DIF Coahuila. “Es un privilegio para mi trabajar por las personas adultas mayores, por las personas con discapacidad, por las niñas y niños, es una motivación para mi vida”.
Pero a eso le suma algo más, “Soy madre, esposa y abuela, podemos resumir que mi vida ha sido feliz y que cada día me reinvento para ser una mejor persona”.
Fue muy precisa al señalar que ama ser mujer y nos explicó el por qué, “Somos fuertes, porque de nosotros se da la vida y porque las mujeres somos el soporte de todo hogar”.
Insistió, “Ser mujer es ser valiente, es ser consejera, es ser paciente; es también sacrificio, pero cuando ves que tu esfuerzo se refleja en la sonrisa de tus hijos o de las personas a las que ayudas, sabes que todo vale la pena".
Se pronunció a favor de la igualdad y el respeto, aún para quienes algunos consideran diferentes. “Todos por igual merecen respeto y acceso a sus derechos, yo no puedo tratar a alguien diferente porque piensa distinto a mí en toda circunstancia de prevalecer el respeto”.
Insistió en que es afortunada en vivir en un país donde la mujer tiene libertad, “Hemos avanzado, tal vez no a la velocidad que todas y todos quisiéramos, pero ha sido la misma gente quien ha impulsado la igualdad y es una lucha que vamos a ganar cuando escuchemos todas las voces y atendamos sus demandas. Esa no es solo una tarea de los gobiernos, es una responsabilidad de todos”, puntualizó.
Al igual que otras mujeres ha tenido temores y nos compartió que siempre ha sido prioridad en su vida que sus hijas y ahora su nieto sean felices, “Afortunadamente puedo decirte que mis hijas y mi nieto, son felices, luchan por sus sueños y me tienen a mí para ir con ellos de la mano”.
Marcela Gorgón es una mujer que ha mostrado sensibilidad ante las necesidades de madres de familia por sacar adelante a sus hijos en la adversidad. Como presidenta honoraria de Desarrollo Integral de la Familia ha buscado que sean atendidas en la medida de su necesidad.
