Torreón, Coahuila. - No cabe duda que la situación del clima asociado a los nulos apoyos le sigue provocando serios problemas a la gente del campo, que ve cómo transcurren los días sin una sola precipitación que venga a brindarles un respiro y sobre todo les ayude a que en sus cultivos las plantas no se estresen al máximo y con ello se reduzcan drásticamente sus niveles de producción. El cambio climático ya empieza hacerse sentir con mayor intensidad en La Laguna en todos los cultivos desde las hortalizas hasta el algodonero, sin dejar de lado la producción de leche y miel.
En el caso de La Laguna, se han presentado datos de los cambios extremos que se han sufrido en la región, por ejemplo, de 2011 a la fecha se han registrado incrementos en las temperaturas que son superiores a los 44 grados centígrados, pero también temperaturas mínimas de 8 grados bajo cero, la helada negra, se han registrado nevadas y vientos superiores a los 150 kilómetros por hora. Y hoy en día el termómetro no cede a los 40 grados, precisó el presidente del Sistema Producto Tomate, Jesús Dorantes Miranda.
“Las altas temperaturas le están pegando a todos los cultivos, dígase tomate, chile, melón, sandía o hasta el propio algodonero, pues sus rendimientos tienden a caer por lo estresado de la planta, a esto hay que agregar la baja en la producción de leche y que decir de la pobre producción de miel”, reiteró.
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“El exceso de calor estresa mucho a la planta, en pocas palabras el calor de 40 grados como el que hemos tenido se ha convertido en el principal enemigo”, destacó.
En La Laguna se cuenta con 450 mil cabezas de ganado en la producción leche con un estimado de 30 a 40 litros por animal, el cual con este calor se reduce en un 10 a 15 por ciento.
En el programa de agricultura protegida con el Tomate se tienen 850 hectáreas con un ritmo de producción de 140 a 150 toneladas por hectárea, el cual se cae hasta en un 30 por ciento.
La presidenta del Sistema Producto Miel. María Guadalupe García Rosas confirmó que la producción de miel sigue a la baja derivado del cambio climático pues los climas extremosos le siguen pegando a la producción en las 8 mil 500 colmenas con que se cuenta en la región lagunera de Coahuila y Durango. Ya las propias abejas buscan donde alimentarse ante la poca floración.
Agregó que otro efecto del cambio climático es la presencia de otros tipos de plagas que no se tenían, mientras que otras que ya existían han intensificado su nivel de ataque.
En el tema del agua, en la Comarca Lagunera se ha modificado el patrón de lluvias, ya que anteriormente se contaba con una sola temporada importante, ahora se presentan dos: una entre los meses de julio y agosto que como se puede observar ha sido muy pobre con solo 71 milímetros acumulados y la otra entre septiembre y octubre.
“Ya La Laguna vivió una época muy complicada entre 1993 y el año 2000 donde ni agua se tenía en las presas. Del 2001 a la fecha las condiciones climatológicas están llenas de incertidumbre, pues como puedes quedarte sin agua todo el año ni para las presas, o como puedes que derivarla al lecho seco del Río Nazas, así se vive el cambio climático en La Laguna”, reiteró Jesús Dorantes Miranda.
