Jamás se pensó el impacto tan grande que el Paro Nacional de Mujeres tendría en México; el nueve de marzo del 2020 será un día para recordar en nuestro país, las calles lucieron relativamente solas, las clases las suspendieron, el vagón rosa en la CDMX estuvo vacío, algunos bancos, comercios, restaurantes y más cerraron. ¿Ahora qué sigue?, Cristina Garza, activista feminista y periodista lagunera, manifestó que sigue luchar y luchar día con día.
Manifestó que fue bastante sorprendente ver que en la mayoría de los estados si hubo una ausencia que se notó, sobre todo en las instancias de gobierno, empresas, comercios y medios de comunicación, “las mujeres fueron las que promovieron el hecho de que otras de sus compañeras no asistieran a trabajar”.
Una de las acciones que no le pareció fue la suspensión de clases en distintas instituciones educativas, pues según Cristina Garza, es precisamente ahí donde se pretendía hacer conciencia sobre el objetivo del paro, “que se reconociera el trabajo que hace una mujer en todos sus ámbitos, en el laboral, dentro de su casa y en la crianza”.
Incluso en redes sociales, se obtuvo una respuesta favorable, aparte de que hubo una ausencia de las mujeres, en publicaciones y tweets había una motivación para quienes acudieron a las marchas y las que se unieron al feminismo.
Cristina Garza explicó que todo este movimiento comenzó desde el año 1700, y que a lo largo de la historia ha tenido distintos picos importantes, como en los 50s y 70s, y en la actualidad que es el movimiento de resistencia más importante en el mundo, “la realidad es que las exigencias siguen siendo las mismas que en 1700 y eso es muy triste”.
Por último recalcó que el fin de todo esto es que las mujeres en actuales y nuevas generaciones no acepten los malos comportamientos del sistema, “el centro de todo está en nosotros, dialogar y entender la otredad; ser empáticos con las distintas formas violencias que enfrentan las mujeres”.
