A partir de la próxima semana se podría reflejar un impacto negativo para la industria automotriz de Coahuila con posibles paros técnicos, luego de que la huelga de las armadoras de General Motors, Ford y Chrysler, y filial de Stellantis en Estados Unidos, haya cumplido una semana.
“Si ustedes me preguntan qué si afectará al estado esta huelga, yo les digo que sí, pero aún no sabemos en qué medida, pero ya se han comenzado a presentar las primeras inquietudes entre las empresas de proveedores de la industria automotriz”, subrayó Miguel Monroy Robles.
El director general de la COPARMEX Coahuila Sureste señaló que las que tendrán una mayor impacto negativo son los proveedores donde no todo el contenido de su trabajo es 100 por ciento de componentes mexicanos, sino que dependen mucho de los que vienen de importación de Norteamérica.
“Esta afectación será a corto plazo porque todas las entregas para la industria automotriz se hacen a tiempo y para la próxima semana se comenzarán a ver los reacomodos en los pedidos y en los inventarios para minimizar el impacto y tratar de evitar los paros técnicos”, abundó.
Pero enfatizó que aún no se sabe en realidad el impacto que se tendrá entre los proveedores de la industria automotriz de la entidad, porque para ello se debe de verificar el banco de inventario que tienen las empresas que requieren componente que vienen de Estados Unidos y hasta donde les alcanzará.
Manifestó que las que tendrán menos afectaciones son aquellas que importan parte de sus componentes de Asia y de Europa, así como de otras plantas que están en México.
“Lo que requieren en sí son productos especializados, pero ya muchas compañías andan en la búsqueda de nuevos proveedores locales para bajar este impacto negativo lo menos posible”, manifestó Monroy.
