De 102 millones que aplicaba al año el Gobierno Federal para la atención a pacientes con VIH/SIDA, la actual administración en el país, en sus inicios, redujo esta cantidad casi al 50% porque en el 2022 se destinaron solo 52 y se desconoce lo que se invertirá esta año para quienes padecen esta enfermedad.
Aída García Badillo, dirigente de EUX Arte y SIDA, cuestionó los recortes en salud pues las personas fallecen por falta de tratamientos.
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En el caso del VIH/SIDA, los medicamentos implican un gasto cercano a los 33 mil pesos mensuales que la mayor parte de las personas contagiadas no pueden pagar por carecer de los recursos económicos para atenderse.
Señaló que el Fondo de Salud para el Bienestar, antes llamado Fondo de Gastos Catastróficos, atendía a pacientes contagiados y con cáncer, pero prácticamente desapareció.
El problema se agravó con la pandemia del coronavirus porque las autoridades sanitarias federales se desentendieron de la lucha contra el SIDA que también fue parte de una crisis sanitaria, abundó.
Consideró que el país enfrenta una pandemia generalizada de contagios por este padecimiento por hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres, y esto implica que las madres se infecten y los hijos nazcan con la enfermedad.
"A esto se le suma la crisis por desabasto de medicamento que tenemos en todo el país. De aquí se van a divertir a Nuevo León y de allá regresan infectados.
Aquellas personas que conocí en los ochentas, en los noventas, que se infectaron lograron sobrevivir hasta esta época, pero los niños infectados en esos años, no lograron sobrevivir porque los retrovirales son altamente fuertes", señaló.
Reiteró que el desabasto de medicamentos inició en el actual sexenio federal porque se redujeron los presupuestos de todo. Por ejemplo, para Tabasco asignaron 280 mil millones de pesos para obra pública y para Coahuila 2 mil y una de las partidas de donde tomaron dinero fue en salud.
"El dinero es el mismo, nada más que lo mueven de un lugar para otro. Ese se fue para obra en Tabasco, pero no para la salud de los coahuilenses. Si no invierten un peso en un condón, cómo lo van hacer en un medicamento que cuesta 33 mil pesos”, dijo.
