/ martes 9 de mayo de 2023

¿La recuerdas? La antigua cárcel de Gómez Palacio

La cárcel era conocida por su enorme patio llamado "La Leona", al cual caía cualquier persona que intentaba escapar de la prisión

La antigua cárcel de Gómez Palacio, conocida popularmente como la Cárcel de la Mina, estaba ubicada en la calle Mina casi esquina con 20 de Noviembre. Se trató de una cárcel que funcionó desde 1958 hasta 1995. La cárcel era conocida por su llamado "La Leona", al cual caía cualquier persona que intentaba escapar de la prisión.

Este lugar era donde se concentraban a los infractores de algún delito, tras la apertura del Cereso, el lugar se comenzó a utilizar como un módulo de detención (la cárcel municipal), mientras que otra parte se convirtió en un centro cultural.

Antigua Cárcel de Gómez Palacio

Las llamadas al número telefónico 7 14 00 28 eran una forma común para las familias y amigos de los prisioneros para verificar si estaban detenidos en esta cárcel. Durante su tiempo de funcionamiento, la cárcel se convirtió en un lugar de tristeza y dolor para muchos.

Entre las historias que se cuentan sobre esta propiedad está la fuga masiva de casi 30 reos en el año 1988, escape encabezado por un supuesto feminicida (término que ni siquiera existía para la época) que años más tarde supuestamente recibiera el perdón de Juan Pablo II.

De cárcel a Centro Comunitario

A pesar de su importancia en la historia local, la cárcel finalmente fue cerrada en 1995 y se mantuvo abandonada durante muchos años. Durante este tiempo, el edificio fue objeto de vandalismo y abuso, lo que lo convirtió en un peligro para la comunidad.

Sin embargo, en 2015, las autoridades anunciaron un proyecto que cambiaría por completo el uso para esta propiedad. La antigua cárcel de Gómez Palacio fue objeto de renovación y rehabilitación para convertirla en lo que hoy se puede ver como un centro cultural.

El Juzgado Administrativo Municipal sigue en la propiedad pero fue trasladado a un costado de los módulos de detención preventiva ubicada sobre la avenida Hidalgo, a espaldas de la fachada principal.

Para esta rehabilitación y nuevo uso se invirtieron casi 2 millones de pesos, los cuales eran correspondientes al programa Hábitat para la construcción de un nuevo Centro de Desarrollo comunitario. Actualmente, el edificio histórico ahora alberga exposiciones, talleres y eventos culturales para la comunidad, lo que le da un nuevo propósito y significado para los ciudadanos locales.

La antigua cárcel de Gómez Palacio, conocida popularmente como la Cárcel de la Mina, estaba ubicada en la calle Mina casi esquina con 20 de Noviembre. Se trató de una cárcel que funcionó desde 1958 hasta 1995. La cárcel era conocida por su llamado "La Leona", al cual caía cualquier persona que intentaba escapar de la prisión.

Este lugar era donde se concentraban a los infractores de algún delito, tras la apertura del Cereso, el lugar se comenzó a utilizar como un módulo de detención (la cárcel municipal), mientras que otra parte se convirtió en un centro cultural.

Antigua Cárcel de Gómez Palacio

Las llamadas al número telefónico 7 14 00 28 eran una forma común para las familias y amigos de los prisioneros para verificar si estaban detenidos en esta cárcel. Durante su tiempo de funcionamiento, la cárcel se convirtió en un lugar de tristeza y dolor para muchos.

Entre las historias que se cuentan sobre esta propiedad está la fuga masiva de casi 30 reos en el año 1988, escape encabezado por un supuesto feminicida (término que ni siquiera existía para la época) que años más tarde supuestamente recibiera el perdón de Juan Pablo II.

De cárcel a Centro Comunitario

A pesar de su importancia en la historia local, la cárcel finalmente fue cerrada en 1995 y se mantuvo abandonada durante muchos años. Durante este tiempo, el edificio fue objeto de vandalismo y abuso, lo que lo convirtió en un peligro para la comunidad.

Sin embargo, en 2015, las autoridades anunciaron un proyecto que cambiaría por completo el uso para esta propiedad. La antigua cárcel de Gómez Palacio fue objeto de renovación y rehabilitación para convertirla en lo que hoy se puede ver como un centro cultural.

El Juzgado Administrativo Municipal sigue en la propiedad pero fue trasladado a un costado de los módulos de detención preventiva ubicada sobre la avenida Hidalgo, a espaldas de la fachada principal.

Para esta rehabilitación y nuevo uso se invirtieron casi 2 millones de pesos, los cuales eran correspondientes al programa Hábitat para la construcción de un nuevo Centro de Desarrollo comunitario. Actualmente, el edificio histórico ahora alberga exposiciones, talleres y eventos culturales para la comunidad, lo que le da un nuevo propósito y significado para los ciudadanos locales.

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