En un lamentable suceso, un niño migrante de tan solo tres años perdió la vida ahogado en el Río Bravo, siendo encontrado por pescadores en el ejido El Saucito, cerca de Guerrero, Coahuila. El hallazgo se realizó en un paraje cercano a la zona, revelando condiciones que sugieren que el pequeño llevaba varios días fallecido, según informó la fiscalía del Estado.
El cuerpo del menor fue recuperado y trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) para llevar a cabo la necropsia de ley, además de emprender esfuerzos para su identificación.
Este trágico evento se suma a una serie de lamentables incidentes que han ocurrido en la región, donde, durante el último mes, más de 20 migrantes, incluyendo hombres, mujeres y niños, han perdido la vida mientras intentaban cruzar el Río Bravo sin la documentación correspondiente, en su camino desde Coahuila hacia Texas.
El Río Bravo, en algunas áreas, presenta condiciones de alta peligrosidad debido a la formación de remolinos y corrientes fuertes, lo que aumenta el riesgo de arrastre, especialmente para los menores. En una reciente operación de rescate, se salvaron 14 personas, incluyendo siete menores de edad, entre ellos niños de 2 y 3 años, así como bebés de apenas dos meses de nacidos.
En lo que va del presente año, la frontera común de Coahuila y Texas ha sido testigo de la tragedia de 210 migrantes fallecidos en su intento de cruzar hacia Estados Unidos, subrayando la peligrosidad de la ruta y la urgente necesidad de abordar medidas para prevenir más pérdidas humanas en la zona fronteriza.
