Torreón, Coahuila. – Los cinco menores que resultaron intoxicados por consumir galletas y frituras a base de marihuana, ya fueron dados de alta en el Hospital General (HG) de Torreón y se encuentran de nuevo en sus viviendas.
Fue el pasado miércoles, alrededor de las 13:00 horas, cuando una madre de familia que habita en la calle Internacional, proporcionó los productos a los niños y niña, incluyendo sus hijos, sin saber con qué estaban elaborados.
Aunque primero dijo que la “patrona” de la vivienda donde hace la limpieza en la colonia Satélite se los había regalado, después cambió su versión y aseveró que ella los agarró.
Lo que sí pasó es que las “Chokis” y “Takis”, que en la envoltura decían “Cannamex y Delta-8_”, llegaron a Alan de 9 años, Emmanuel de 7, Isaac de 4, Sofía de 3 y Samuel de 2, quienes no dudaron en comérselos y al poco tiempo empezaron con malestares, como mareos.
Es por eso que se pidió el apoyo de la Cruz Roja, quienes primero los habían trasladado a la benemérita institución, pero luego los llevaron al HG, en donde salieron por la noche.
“La señora luego comentó que no se los dieron, que los vio y los agarró y los trajo para los niños, pero no sabía lo que contenían. Tres de los menores fueron dados de alta por la tarde. Ya en la noche todos estaban en casa, gracias a Dios”, comentó una vecina.
“No van a investigar, según lo que dijeron las autoridades, pues no se denunció y los niños ya están bien, en sus casas, fue un error”, agregó.
Al respecto, el director de Seguridad Pública Municipal (DSPM), Comisario César Perales Esparza, comentó que sí se puede andar por la calle con este tipo de productos comestibles a base de marihuana, siempre y cuando estén autorizados por la Ley General de Salud y que provengan de un comercio establecido.
“Y que claramente sean enfocados a una persona que cuente con los requerimientos y que sea como un complemento medicinal. Como en los medicamentos, se les indica que no puede ser usado en menores de edad, a menos que sean con supervisión y tenga una prescripción médica”.
“Ayer claramente fue un descuido desde que los menores tuvieron acceso a esos productos”.
En el caso de los agentes de la corporación, lo primero que se deben hacer es garantizar la seguridad y la salud de los menores, para luego gestionar la situación ante la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (PRONNIF) o DIF Municipal, puntualizó el jefe policiaco.
En ese contexto, el titular de Salud de Torreón, Jorge Mario Galván Zermeño, también coincidió que este tipo de productos, al igual que las bebidas embriagantes y el cigarro, no son para menores de edad.
“Entonces, nosotros lo que pedimos, es que los padres de familia sean más observadores, pues ni de broma deben de proporcionarse, pues hay consecuencias físicas”.
“En este caso, los niños pudieron presentar problemas respiratorios muy severos y cardiovasculares”.
En tanto, la PRONNIF señaló que aperturó un expediente administrativo para verificar las condiciones de los infantes y su entorno. De hecho, varios de ellos fueron llevados ante las instalaciones de la dependencia, en donde se descartó peligro y resguardo.
