/ viernes 16 de julio de 2021

Sobrepeso y consumo de alcohol acentúan el riesgo de padecer “gota”: IMSS

Ayudan a prevenirla una alimentación balanceada y reducir la ingesta de carnes rojas

Los hombres con sobrepeso y aquellos que con frecuentes consumidores de bebidas alcohólicas, son los más propensos a padecer de “gota”, como se conoce popularmente a una de las formas de artritis más dolorosas, advierte el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Coahuila

Es hecho, esta enfermedad suele ser siempre más común entre la población masculina, sin embargo, y aunque en menor incidencia, también puede presentarse en mujeres post-menopáusicas.

La información al respecto la comparte doctora Derikah González Pérez, especialista en reumatología adscrita al Hospital General de Zona 2 del IMSS en Coahuila, quien explica que la también llamada “artritis gotosa” es la acumulación de ácido úrico en el cuerpo y que se manifiesta por lo regular con hinchazón, enrojecimiento, calor y rigidez en la articulación.

Explica que el padecimiento se desarrolla después de varios años, e incluso décadas, de padecer hiperuricemia, es decir, niveles elevados de ácido úrico en la sangre, manifestándose principalmente en el dedo gordo del pie, tobillo y, con menos frecuencia, en la rodilla.

Como en todos los padecimientos crónicos, es necesaria la corresponsabilidad del paciente ya que si bien el IMSS contribuye con el diagnóstico, seguimiento y tratamiento de la enfermedad, su evolución y el resultado dependerá también del apego que tenga la persona tanto en el consumo de una dieta equilibrada como en desterrar los hábitos nocivos.

De acuerdo con la especialista, el avance natural de este mal puede comprender cuatro etapas que son: niveles elevados de ácido úrico (hiperuricemia sin síntomas); ataque agudo de una articulación caracterizado por dolor, calor y enrojecimiento que se manifiesta generalmente por las noches; intervalo intercrítico, que es cuando existen periodos libres de síntomas entre las molestias y funcionamiento normal de las articulaciones, las cuales pueden agravar la inflamación y gota tofácea crónica, en la cual se produce deformidad y destrucción del hueso y cartílago afectados, así como posible daño renal.

González Pérez dijo que el mejor mecanismo de prevención es evitar la elevación de ácido úrico, por lo que se recomienda mantener el peso ideal, alimentación balanceada y evitar o reducir la ingesta de carnes rojas, mariscos, lentejas, champiñones y alcohol, principalmente cerveza.



Los hombres con sobrepeso y aquellos que con frecuentes consumidores de bebidas alcohólicas, son los más propensos a padecer de “gota”, como se conoce popularmente a una de las formas de artritis más dolorosas, advierte el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Coahuila

Es hecho, esta enfermedad suele ser siempre más común entre la población masculina, sin embargo, y aunque en menor incidencia, también puede presentarse en mujeres post-menopáusicas.

La información al respecto la comparte doctora Derikah González Pérez, especialista en reumatología adscrita al Hospital General de Zona 2 del IMSS en Coahuila, quien explica que la también llamada “artritis gotosa” es la acumulación de ácido úrico en el cuerpo y que se manifiesta por lo regular con hinchazón, enrojecimiento, calor y rigidez en la articulación.

Explica que el padecimiento se desarrolla después de varios años, e incluso décadas, de padecer hiperuricemia, es decir, niveles elevados de ácido úrico en la sangre, manifestándose principalmente en el dedo gordo del pie, tobillo y, con menos frecuencia, en la rodilla.

Como en todos los padecimientos crónicos, es necesaria la corresponsabilidad del paciente ya que si bien el IMSS contribuye con el diagnóstico, seguimiento y tratamiento de la enfermedad, su evolución y el resultado dependerá también del apego que tenga la persona tanto en el consumo de una dieta equilibrada como en desterrar los hábitos nocivos.

De acuerdo con la especialista, el avance natural de este mal puede comprender cuatro etapas que son: niveles elevados de ácido úrico (hiperuricemia sin síntomas); ataque agudo de una articulación caracterizado por dolor, calor y enrojecimiento que se manifiesta generalmente por las noches; intervalo intercrítico, que es cuando existen periodos libres de síntomas entre las molestias y funcionamiento normal de las articulaciones, las cuales pueden agravar la inflamación y gota tofácea crónica, en la cual se produce deformidad y destrucción del hueso y cartílago afectados, así como posible daño renal.

González Pérez dijo que el mejor mecanismo de prevención es evitar la elevación de ácido úrico, por lo que se recomienda mantener el peso ideal, alimentación balanceada y evitar o reducir la ingesta de carnes rojas, mariscos, lentejas, champiñones y alcohol, principalmente cerveza.



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