Torreón, Coahuila.- A unas semanas de que anunciara el Gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, que los menores de 5 a 12 años de edad de la región lagunera tendrán la posibilidad de ser vacunados contra el Covid-19 en la franja fronteriza, en ciudades como Piedras Negras o Acuña, ha habido poco interés de los padres de familia para que aprovechen el programa, existiendo apenas 2 mil 700 cartas de autorización para que alumnos del rango indicado hagan el viaje para recibir el biológico.
La baja respuesta de los padres, consideró la maestra Flor Estela Rentería Medina, Coordinadora de Servicios Educativos de la Región Laguna, se debe al temor de que pueda pasar algo a sus hijos en el viaje o porque son lugares muy distanciados, de los que desconocen el entorno:
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“Antes de salir de vacaciones hicimos el primer censo, tuvimos aproximadamente 2 mil 700 cartas de autorización en ese momento, que son pocas. Diríamos que hay miedo de los padres, sobre todo por la distancia, la lejanía, nosotros tendríamos que hacer un viaje de más de siete horas de ida y otras siete horas de vuelta”, expuso la funcionaria.
También está el tema de los alumnos menores con alguna comorbilidad, en donde los padres igualmente tienen incertidumbre de que no vayan a ser bien atendidos, en caso de presentarse alguna complicación de salud.
Otro factor que pudiera complicar que se lleve a un número importante de niños laguneros a vacunar, es el costo del viaje: “el costo de los camiones es una situación extraordinaria y en caso de que un alto porcentaje de padres de familia aceptara que se trasladaran, se tendría que buscar un mecanismo para que el costo no fuera solo absorbido por los ayuntamientos, ya que si hacemos la multiplicación, sí es un presupuesto que muchos de los alcaldes no estarían a lo mejor en condiciones de cubrir”.
