Torreón, Coahuila. – Luego de trabajar toda la noche y madrugada, Jorge Luis Juárez se dirigía a su casa a descansar, sin imaginar que sus manos serían las primeras en tocar a Miguel Ángel y traerlo al mundo.
Lleva cuatro años desempeñándose como inspector de Protección Civil del Ayuntamiento de Torreón y le tocó trabajar desde las 20:00 horas del miércoles.
Tras cumplir con su jornada, iba rumbo a su hogar, alrededor de las 7:40 horas del jueves a dormir, bañarse, desayunar y alistarse de nuevo para cumplir con su otra responsabilidad como Comandante de Socorrismo de la Cruz Roja, institución para la cual ha ofrecido sus servicios durante los últimos 22 años.
Al transitar por la antigua carretera a San Pedro, a la altura del puente del Campesino, se percató que desde un automóvil se pedía auxilio pues en la parte de atrás iba una joven de 19 años que estaba por tener a su bebé.
“Me acerqué y vi a una persona que ya estaba en labor de parto. Decidí apoyarla y entré al coche en la parte de atrás y ya estaba dando alumbramiento, en el momento que la acomodé pasó a expulsar al bebé”, dijo.
Gracias al buen estado de salud del bebé y de su madre el procedimiento fue rápido, sin embargo, tuvo que improvisar al no contar con su equipo de socorrista y el que aporta una ambulancia.
“Había unas frazadas y las usé para limpiar al bebé y cobijarlo, porque estaba haciendo un poco de frío”, mencionó.
“Usé lo que tenía a la mano”, acotó.
El nuevo lagunero presentó buena respiración, coloración y temperatura.
“Solo ayudé, también, a expulsar la placenta. No traía para cortar el cordón umbilical, pero en ese momento no era tan importante”, indicó.
Una vez con Miguel Ángel en brazos, se trasladaron a la Clínica Número 16 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con el apoyo y la custodia de unidades de Protección Civil y Tránsito y Vialidad, para llegar más rápido.
“Tuve la fortuna de ser el primer contacto con el bebé. Lo mejor de esto fue su buen estado de salud, porque en un parto fortuito no hay las condiciones de higiene ni de nada, pero el bebé venía bien y eso contó mucho, además de la valentía de la mamá por aguantar los dolores”.
Sin duda, su experiencia como socorrista en la Cruz Roja también fue fundamental.
“En la Cruz Roja entre alrededor de las nueve de la mañana y salgo a las cinco de la tarde”, indicó.
“Durante el parto tenía limitación de equipo, pero contaba con el conocimiento”, expresó.
“No traía el equipo pasa sacar las secreciones, entonces tuvo que estimularlo para que llorara y él expulsara todo lo que le quedaba en la boca y en la nariz”, manifestó.
Además, no es la primera vez que participa en partos y han sido tantos que no puede ni decir algún estimado.
Es algo increíble ayudar a alguien a vivir, describió Jorge Luis Juárez al preguntarle qué se siente.
La mamá estuvo agradecida en todo momento y ella fue la comentó que se llamaría Miguel Ángel, quien es su segundo hijo.
NUMERALIA
22 años lleva colaborando en Cruz Roja y cuatro en Protección Civil.
DATO
Es el segundo hijo de la joven madre.
Es increíble ayudar a alguien a vivir
Jorge Luis Juárez
