El fervor guadalupano sigue en aumento en La Laguna y una muestra de ello es el creciente número de grupos, asociaciones, empresas o familias que se deciden a peregrinar o acudir a la Iglesia de Guadalupe en su localidad, o bien los casos de familias que por años han dedicado su fe para la realización de la tradicional reliquia que comparten con sus vecinos y amigos.
Desde la última semana del mes de noviembre se iniciaron las tradicionales peregrinaciones por la avenida Juárez hasta llegar a la iglesia de Guadalupe, considerando los organizadores un crecimiento del 20 por ciento en el número de los grupos o empresas participantes, por lo que la devoción a la Virgen de Guadalupe sigue a la alza, reiteraron.
Las reliquias también son parte de estos festejos, algunas que se organizan este mismo día 12 de diciembre o bien otras que se realizaron en días pasados para cumplir con un compromiso realizado y que viene en muchos casos de generaciones atrás.
La familia disfruta de esta celebración y esto se puede ver plasmado en las calles avenidas o calzadas por donde se instala una danza o un grupo musical que advierte que se celebra con reliquia a la Guadalupana.
Los fieles católicos mantienen un fervor profundo por la Guadalupana, la Virgen Morena, que, según la leyenda, se le apareció al indígena Juan Diego el 12 de diciembre de 1531.
La tradición católica señala que la Virgen pidió a Juan Diego que llevara al obispo fray Juan de Zumárraga el mensaje que se le construyera un templo en ese lugar, el cerro del Tepeyac.
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La conquista española se había concretado diez años antes, y en ese lugar los aztecas adoraban a una de sus diosas, Tonantzin.
En la última de las apariciones, para convencer al incrédulo obispo, quedó estampada la imagen de la Virgen en el ayate que usaba Juan Diego. Durante siglos, para los indígenas la Virgen de Guadalupe fue Tonantzin, y hoy la imagen de la Virgen Morena está presente en todo México.
