Sin contar con aquellos que suelen ofertar sus mercancías respaldados por permisos provisionales, son más de 300 los vendedores que se detectaron desarrollando sus actividades en la vía pública en el exterior de los diversos panteones de la localidad, donde el correspondiente operativo de vigilancia a cargo de personal de Plazas y Mercados se realizó ayer de manera intensiva para evitar y en su caso sancionar situaciones de desorden.
Lo únicos comerciantes que en esta ocasión obtuvieron permisos temporales son los que anualmente suelen colocarse antes y durante la celebración del Día de Muertos en los tradicionales pequeños mercados de flores que se instalan sobre la calle Leandro Valle, junto a la Alameda, y en la Blanco entre las avenidas Presidente Carranza e Hidalgo del centro de la ciudad, comentó el titular de la dependencia municipal Carlos de Lara McGrath.
Los demás, agregó, son aquellos que por propia iniciativa y sin realizar previamente ningún trámite ante el Municipio, simplemente acostumbran instalar sus puestos de venta de flores, alimentos y otros productos en las inmediaciones de los cementerios.
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Es precisamente ahí donde los inspectores de Plazas y Mercados se dieron a la tarea de llamar al orden a los comerciantes, para evitar que con sus puestos obstruyeran el libre tránsito peatonal y vehicular, o que incurran en situaciones de riesgo o desorden, además de que cada uno debió cumplir con una cuota diaria de derecho de piso que de acuerdo con la ley es de 27 pesos.
