Torreón, Coahuila.- Con toda una vida aficionado a la colección de autos clásicos o antiguos, que solo se vio frenada cuando en los años 90s recrudeció la delincuencia organizada y se vio en la necesidad de venderlos o deshacerse de ellos por seguridad, el doctor Miguel Ángel Barocio Sada, sigue convertido en La Laguna en uno mayores coleccionistas, quien advierte hay quienes lo hacen por el placer de tenerlos o hay quienes lo ven como un buen negocio.
“Desde que yo tenía cinco años me gustan los carros, y a los quince años hice mi primer vehículo con un motor de motocicleta, llantas de bici y de carro, y ya una vez que empecé a trabajar y que me recibí de mi carrera, esta afición se fue convirtiendo en una pasión en la cual ya cumplo 40 años”, recuerda el doctor Barocio Sada.
“Hoy tengo nueve carros, todos son una joya, cada uno tiene su propia historia, su momento y su valor sentimental, los que tuve en el pasado los recuerdo con cariño, pero ante la delincuencia, lo mejor era deshacerme de ellos, pero esta pasión nada me lo quita”, reiteró.
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La Renault es parte de la historia de los carros antiguos, son 125 años de esta fabrica de autos, aunque el doctor Barocio tiene en su poder un vehiculo armado aquí en La Laguna, un prototipo, un Renault car fabricado en la planta en Gómez Palacio, un carro netamente lagunero, hecho por manos laguneras.
Para ser un buen coleccionista de autos, además del recurso, se necesita el gusto, la pasión y la paciencia para irlos transformando a lo que uno quiere, darle su propio color y su estilo, hacerlo que se vea original.
“Para transformar hay que invertir, a veces lo quiere uno dejar como nuevo, pero eso se logra con un millón de paciencia, restaurar el motor, la pintura, la carrocería, suspensión, sistema de frenos, tapicería, vidrios, no es solo darle una pasadita, muchos medios los pintan y piensan que con eso ya tienen el mejor auto de colección, y no es así”, aseveró.
En La Laguna hay quienes compran autos antiguos, los restauran un poco, los ponen a funcionar y tan pronto está listo los quieren vender en cantidades fuera de órbita, como si fuera vendido directo de la fábrica.
Para los coleccionistas de autos clásicos o antiguos hay tres niveles de precio: el que está en excelente estado y conserva todas sus piezas originales, incluido el motor, el que está en regulares condiciones y el que está totalmente arrumbado, y mucha gente que tiene el carro arrumbado los quieren vender en un dineral, aseguro el coleccionista Miguel Ángel Barocio.
Los precios del mercado para conseguir un auto clásico o antiguo son muy variantes, pues hoy un carro que no sea muy cotizado pudiera conseguirse en los 20 mil pesos, para ahí de partir a su proceso de restauración, pero ya si hablamos de un Mustang 65, Dinasty, FIAT 1906, Buick, Corvette, Mercedes, estos aun en chatarra te andan costando hasta los 300 mil pesos, y ya restaurados te los venden hasta en un millón de pesos, detallo Barocio Sada.
“Ser coleccionista te deja un millón de satisfacciones, tal vez no deje ganancias, pero hay quienes, si se dedican a restaurar carros y le ganan, generalmente no se le pierde tanto, pero el gusto de haberlo rescatado te deja una gran satisfacción”, recalcó.
En La Laguna en los últimos años ha crecido el número de coleccionistas, estimándose en unos 50 al día de hoy.
