Torreón, Coahuila.- “No lo veo viable, lo veo difícil, habrá que ver cuáles son los planes de la federación, pero nosotros por lo pronto no nos vamos a adherir”, declaró el titular de la Secretaría de Salud del Gobierno del Estado, Roberto Bernal Gómez, al hablar de por qué Coahuila no ha firmado hasta ahora su integración al nuevo sistema IMSS Bienestar que se impulsa desde la Presidencia de la República.

El funcionario hizo ver que desde su particular punto de vista, no tiene factibilidad operativa ni administrativa la propuesta que se promueve con la idea de centralizar todos los servicios de salud pública al dejarlos bajo el control del Seguro Social.

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Planteó al respecto que lograr un cambio de tal naturaleza representaría hacer frente a una serie de implicaciones muy difíciles de poder resolver, al tomar en cuenta entre otras cosas que el IMSS regular actualmente está soportado de manera tripartita por los recursos que aportan el gobierno, los trabajadores y los patrones.

“¿qué va a pasar con ese grupo de personas –que pagan cuotas- que es la gran mayoría?, ¿se va a diluir todo”, ¿el patrón va a seguir pagando y los demás no?, ¿va querer el patrón seguir pagando y el empleado va a querer que les siga descontando?, a mí se me hace muy difícil”, expuso.

Bernal Gómez se refirió asimismo a lo difícil que sería desahogar un proceso legal orientado a que el Gobierno del Estado cediera a la federación todos los hospitales que son de su propiedad, y luego, habría que ver cómo resolver los derechos laborales de los trabajadores sindicalizados y de confianza adheridos a todas las unidades médicas del Sistema Estatal de Salud.

También mencionó que con el sistema que se impulsa, se correría el riesgo de que se complique aún más en las unidades de salid el abasto de medicamentos, que actualmente se da a través del INSASBI con una suficiencia de apenas entre el 60 y el 65 por ciento, y las compras se entregan de manera extemporánea.

Por todo lo anterior, el Secretario de Salud en la entidad, y tomando en cuenta las experiencias de otros estados que sí han aceptado, reiteró que por lo pronto “no le vamos a entrar nosotros”, y es que en su opinión personal “hay muchas cosas difíciles en las que no veo claridad, no veo ni pies ni cabeza”.