Saltillo, Coahuila.- La Cuarta Transformación alcanzó a los jubilados y pensionados, quienes ahora padecen una restricción en el servicio médico, como parte de la política de austeridad del Gobierno Federal.

Trabajadores jubilados y pensionados de Pemex, que se están organizado para manifestarse, advirtieron que existe mucha inconformidad, porque se trata de personas de avanzada edad, con algunas enfermedades crónicas y que requieren atención frecuente a sus padecimientos.

Informaron que por órdenes centrales se les suspendió el servicio médico en clínicas privadas, como el Muguerza y Centro Hospitalario La Concepción.

En su lugar, se autorizó la atención en el Hospital Universitario, donde hay buen trato y el personal muy profesional, pero la inconformidad reside en que algunos servicios se los postergan mucho tiempo, como cirugías o estudios de laboratorio, hasta con un mes de retraso.

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Expresaron que esa decisión les fue notificada por el área administrativa y esto se agravó porque el titular que estaba en Saltillo fue transferido a Monterrey, lo que complica los trámites para obtener las autorizaciones para acudir a los centros hospitalarios.

En algunos casos pidieron que la gente acuda a Monterrey para su atención médica, lo cual representa muchas dificultades porque hay muchos jubilados y pensionados de la tercera edad.

Citaron el caso de un trabajador, que pidió autorización para llevar a un familiar a un hospital privado, “pide las facturas y ya veremos”, pero el problema radica en que para solicitar el reembolso se debe facturar a nombre de Pemex y no quieren facilitar el Registro Federal de Contribuyentes, además que tampoco hubo la confirmación de que esos gastos se iban a recuperar.