Gómez Palacio, Durango. - Alrededor de 60 personas, que representan a los propietarios y empleados de bares, canchas de fútbol, gremios musicales, gimnasios, salones de baile, quintas, billares, DJ's, meseros y cargadores, tras reunirse en la Plaza principal de Gómez Palacio, marcharon a la presidencia municipal en una manifestación pacífica, buscando ser recibidos por la alcaldesa Marina Vitela y apelar a su buena voluntad para que ordene la total reapertura de estos negocios, los cuales han cumplido 100 días sin trabajar y obvio, sin llevar ellos, ingresos a sus familias, algunos sobreviviendo de sus ahorros y otros empleándose en otros oficios.
Al frente de esta marcha estuvieron Iván Hernández, representante de la Sonora Everest; Salvador Carrasco, de los bares; y Rafael Ibarra, de las canchas de fútbol uruguayo, quienes confiaron que después de entrar una comisión con las autoridades municipales habrían de salir con una respuesta favorable, tal como se la dieron a los tianguistas, quienes ya trabajan desde hace dos días.
Afirmaron que mantener varados sus negocios por más de tres meses, los ha llevado a una situación económica adversa e insostenible, porque carecieron de ayuda para solventar los gastos propios de la casa y de sus familias y porque además no fueron incluidos en algunos microcréditos que sólo se repartieron en la capital del estado.
Admiten estar de acuerdo que los casos de Covid-19 crecen aceleradamente en el estado de Durango en donde Gómez Palacio no es la excepción, sin embargo, se comprometen a cumplir con el protocolo sanitario, como otros lo hacen tras reaperturar sus negocios y empresas y por ello piden "piso parejo" con el compromiso de ser también aliados para llevar el mensaje de salud a la gente, porque reconocen que es un tema delicado.
Comentaron que estos giros fueron los más sacrificados y tras 100 días sin trabajo, lo que buscan es abrir gradualmente y acatando las instrucciones de la Secretaría de Salud y el municipio, tomando las medidas de regla, como son sanitizar los negocios, poner charola para desinfectar zapatos, exigir la entrada de clientes con cubrebocas, lavarse las manos a la entrada con gel antibacterial o jabón, lo mismo que deben cumplir cada uno de los empleados.
Recordaron que hay mucha gente que juega en las calles o hace ejercicio bajo riesgos, al igual que se han llevado reuniones masivas entre familias, también, sin cubrir con los requisitos sanitarios: "no vemos porque no habremos de abrir y más cuando nosotros ofreceremos todas las garantías para una buena estancia", dijeron.
Aseguraron que han observado actitudes positivas de la alcaldesa Marina Vitela quien está consciente de la pandemia y de la falta de trabajo y por ello, dijeron que le pedirían que les ayude, que ellos también se comprometen a regular el problema de salud que tanto ha afectado a la economía.
"Es necesario regular el trabajo de manera inmediata, porque muchos de nosotros ya no tenemos dinero para mantener a nuestras familias, y debe quedar claro, no pedimos despensas, sino que nos dejen abrir nuevamente nuestros negocios", sostuvieron.
Observaron a la vez, que muchos deben agua y luz y con el temor que les corten ambos servicios, mientras que otros siguieron pagando sueldos, pero que después de 100 días de tener cerrados sus negocios, la situación se ha vuelto insostenible.
"Cumpliremos con todas las medidas que nos indiquen y esperamos que nos atiendan a los que estamos aquí, porque no somos todos, pero si los que tenemos nuestro patrimonio en riesgo y porque la economía raquítica ya no da para aguantar más, concluyeron".
Mientras tanto, esperaban una respuesta favorable de la presidenta municipal.
