Gómez Palacio, Durango. - Bienestar Social visualiza mayor pobreza producto del desempleo, reflejo de la pandemia, la cual ha traído la peor crisis de la historia en México en los últimos 50 años
César Yahir Vitela García, director de este organismo, añadió que es evidente la pobreza en el país a pesar de que no se manejan números reales, donde Gómez Palacio no es la excepción.
El desempleo se ha convertido en el mayor problema por el cierre de empresas, citando como ejemplo Innovatec, quien ya no abrió más sus puertas por las pérdidas económicas con que operó el último año, pese a que tenía una excelente oferta y demanda.
En los recorridos que ha realizado por colonias y sectores de la orilla de la ciudad, es común observar un gran número de padres desempleados o bien a otros que trabajan a medio turno y por consecuencia a medio sueldo.
"La pandemia no bajó en el 2020, considerado como un año catastrófico, al contrario el 2021 viene igual, con problemas económicos por la crisis sanitaria, la desigualdad y la falta equidad, ya que cada quien cuida su patrimonio, sin importarles los demás".
Mientras tanto, seguiremos atacando las necesidades, principalmente la falta de alimento y gestionando los microcréditos con el apoyo de la presidenta municipal Marina Vitela, quien para paliar el desempleo, apoya el programa de Protección Federal, la cual ofrece 600 plazas laborales de agentes, con sueldo neto de más de 9 mil pesos más prestaciones, contratando a gente de 18 a 60 años.
A los jóvenes se les observa en su casa sin hacer nada, pues a falta de escuela también han faltado al trabajo por la reducción de plantillas laborales, mientras que otros no hacen nada y obvio que el resultado es parte de la pandemia, dijo.
Indudablemente que esto se agravará en uno cinco o seis meses y por eso no se tienen datos fidedignos sobre el número de empleos perdidos por el vaivén que hay en la economía.
"Luego que regresemos a la normalidad, será muy difícil acostumbramos al ritmo de trabajo, porque también es cierto, hay quienes se habituaron a la buena vida.
