En el umbral del decimoctavo aniversario de la tragedia en Pasta de Conchos, que enlutó a la región carbonífera cobrando la vida de 65 trabajadores, la comunidad enfrenta una vez más la dolorosa realidad de la pérdida. Esta vez, el lamento se centra en el fallecimiento de Alicia Pecina Carrizales, esposa del minero Jorge de Hoyos Márquez, quien aún permanece atrapado en las entrañas de la mina 8.
La noche del domingo, la Organización Familia Pasta de Conchos anunció el triste deceso de Alicia Pecina Carrizales, de 52 años de edad, quien se suma a una lista ya demasiado larga de viudas que han perdido la vida mientras esperaban justicia para sus seres queridos.
Desde el fatídico incidente en 2006 hasta la fecha, seis viudas han partido, manteniendo incólume su anhelo de justicia para que los restos de sus seres amados puedan finalmente descansar en paz.
Martha López, Norma Vitela, Elizabeth Cermeño, Hilda Mixquiz, Rafaela Botello y ahora Alicia Pecina, se suman a esta triste lista de mujeres que han dedicado años de sus vidas a la búsqueda de respuestas y a la lucha por la dignidad de sus esposos y familiares.
También se unen a ellas algunos padres, como Raúl Villasana, Raymundo Ruiz, Domingo Martínez, Roberto Guerrero y otro más de apellido Tovar, así como las madres de los mineros Juanita Martínez y Dora Arévalo, quienes comparten el dolor y la incansable búsqueda de justicia.
La historia de estas viudas y familias es un recordatorio de la necesidad urgente de rendir homenaje a las víctimas de Pasta de Conchos y de asegurar que se haga justicia. Mientras la comunidad recuerda este trágico evento, es imperativo renovar el compromiso de garantizar la seguridad de los trabajadores y de responsabilizar a quienes estén implicados en negligencias que pongan en riesgo sus vidas.
En este momento de conmemoración y reflexión, la comunidad se une en solidaridad con las familias afectadas por esta tragedia, reafirmando su compromiso de no olvidar y de seguir luchando por la justicia y la seguridad laboral en México.
