Saltillo, Coahuila.- Todos los que hayan participado en la muerte del oso negro en Castaños serán castigados con sanciones que van de los 3 a los 6 años de cárcel, lo que se determinará en las investigaciones iniciadas por la Fiscalía General del Estado, donde también se sabrá si hubo la coparticipación de alguna autoridad local.
Gerardo Márquez Guevara expuso lo anterior al precisar que ya están muy bien tipificadas las conductas de maltrato y crueldad excesiva en contra de los animales, donde en este caso ya se tiene la lista de las personas que habrán de comparecer ante el Ministerio Público.
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El Fiscal explicó que se habrá de determinar la causa de la muerte de este oso mediante una necropsia por parte de los servicios veterinarios; además cabe señalar que ya estaba sin vida al ser rescatado por los elementos policiacos.
INVESTIGACIÓN DE POZO ‘EL PINABETE’ CONTINÚA
Mientras que sobre la investigación del pozo de carbón “El Pinabete”, comentó que se han realizado entre 60 y 70 indagatorias, caso que no se ha judicializado hasta hoy, como entrevistas, declaraciones y peritajes topográficos, entre otras más.
Comentó que si bien la regulación de la minería es de competencia federal y que aquí en Coahuila solo se está a expensas de lo que pudiera resultar del rescate de los mineros atrapados, pero siempre con la intención de que sea con vida, pero que en el fatal hecho de que no sea así se tendrán que asumir lo que es de competencia estatal
Ante la posibilidad de que sea imposible, en un dado caso, recuperar los cuerpos, expuso que eso no beneficia a los dueños, pero que en dicho caso la Federación tendría que practicar las investigaciones correspondientes y asumir este tema.
Explicó que hasta el momento no se puede decir que delitos se han consumado en este accidente, porque serían menores por las lesiones que sufrieron los trabajadores que lograron salir con vida.
Aseguró que se mantiene a Cristian “N” como propietario del pozo porque él mismo así lo asume, pero que el tema de la propiedad es complejo porque hay un titular como beneficiarios de la concesión, pero aparece otro como el que la explota y un tercero como propietario del predio.
“Pero hasta el momento quien está explotando el pozo es quien debiera asumir las primeras responsabilidades por los mineros que resultaron con lesiones leves”, agregó.
