/ viernes 23 de julio de 2021

Aplicarán programa de estimulación de lluvias a beneficio de La Laguna y Zacatecas

Ramón Sandoval Noriega, director de la CONAZA, encabezó la presentación del proyecto

Comarca Lagunera. – La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), a través de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas (CONAZA) y con el apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana de la Secretaría de la Defensa Nacional, han implementado un programa de Estimulación de Lluvias en el Norte del País, para mitigar los efectos de la sequía que afecta principalmente a los Estados de Sonora, Sinaloa, Chihuahua, Durango, Coahuila y Zacatecas.

En la presentación, estuvieron presentes Ramón Antonio Sandoval Noriega, director de CONAZA, José Luis Flores Méndez, titular de SADER en Coahuila, José Luis Nava Rodríguez, encargado de la representación de la SADER en la Región Laguna, y Alejandro Trueba Carranza, encargado del programa de Estimulación de Lluvia.

Se explicó que en cada una de estas entidades, se ha delimitado un polígono de trabajo de 2 millones de hectáreas, para La Región Lagunera de Coahuila, Durango y Zacatecas, se estableció este de manera estratégica para no solo beneficiar con incrementos en la precipitación a importantes áreas de la ganadería y agricultura de temporal ubicadas en la zona de los polígonos, sino que, a través de los escurrimientos superficiales, cuantificar los incrementos en la captación de las Presas Lázaro Cárdenas, Fco. Zarco, Agua Puerca, Yenti, Guadalupe Victoria, El Tigre, Los Naranjos y Tanque aguilereño principalmente.

El proyecto consiste en la aplicación aérea de yoduro de plata, en una solución de acetona, que es liberado en la base de las nubes con humedad presentes en el área del polígono, que detonará un proceso de formación de gotas y liberación de energía que estimula la precipitación en las nubes casi de manera inmediata y con la ventaja adicional de concentrar humedad y dirigir la estimulación a través de la dispersión con trazos aéreos que permiten incrementar y hasta dirigir la cobertura de las precipitaciones de manera controlada.

Para planear y dirigir de la mejor manera los vuelos de estimulación de lluvias, se ha implementado el apoyo meteorológico por personal capacitado y complementado con equipo de radares de la Fuerza Aérea Mexicana, quienes están desde ya, de manera permanente, monitoreando la nubosidad en el área para alertar al equipo técnico sobre cuándo y dónde salir a realizar las aplicaciones del reactivo. Este personal y su infraestructura intentarán también registrar el desarrollo de las nubes, considerando el tiempo y

trayectorias de estimulación para determinar correlaciones de causa efecto observadas.

El proyecto iniciará prácticamente a fines del mes de julio, con el uso de un avión King Air 250 que se apostará en Torreón y de donde partirá a las misiones de estimulación, cuando existan condiciones propicias para la generación de lluvia en el área delimitada en el polígono de trabajo.

Para la evaluación del proyecto, se contará con el apoyo de las instalaciones climatológicas de la Comisión Nacional del Agua, ubicadas dentro del polígono, donde además se instalan pluviómetros adicionales para tener la mayor cobertura posible y cuantificar las precipitaciones generadas en esta superficie.

Se recopilará la información relativa a las entradas de agua en las citadas presas y se analizarán con imágenes de satélite los patrones de humedad que se presenten, como consecuencia de las operaciones de estimulación realizadas.

Se realizará una evaluación del proyecto a través de los aportes de humedad en millones de metros cúbicos, en las áreas beneficiadas de manera directa (áreas dentro del polígono), como indirectas, a través de los ingresos de agua a las presas por los escurrimientos superficiales. Con esta información, se podrá posteriormente inferir el impacto económico.

Cabe destacar que, para considerar como precipitaciones atribuibles al proyecto, se considerarán aquellas que hayan generado láminas de agua con un registro en pluviómetros superior a las pronosticadas a través del sistema de pronóstico europeo.

Finalmente, es necesario destacar también que esta tecnología para estimular precipitaciones no genera ningún daño al medio ambiente, ya que, en las evaluaciones realizadas en el proyecto previo en Ensenada, B.C. durante los meses de febrero y marzo pasados.

Comarca Lagunera. – La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), a través de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas (CONAZA) y con el apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana de la Secretaría de la Defensa Nacional, han implementado un programa de Estimulación de Lluvias en el Norte del País, para mitigar los efectos de la sequía que afecta principalmente a los Estados de Sonora, Sinaloa, Chihuahua, Durango, Coahuila y Zacatecas.

En la presentación, estuvieron presentes Ramón Antonio Sandoval Noriega, director de CONAZA, José Luis Flores Méndez, titular de SADER en Coahuila, José Luis Nava Rodríguez, encargado de la representación de la SADER en la Región Laguna, y Alejandro Trueba Carranza, encargado del programa de Estimulación de Lluvia.

Se explicó que en cada una de estas entidades, se ha delimitado un polígono de trabajo de 2 millones de hectáreas, para La Región Lagunera de Coahuila, Durango y Zacatecas, se estableció este de manera estratégica para no solo beneficiar con incrementos en la precipitación a importantes áreas de la ganadería y agricultura de temporal ubicadas en la zona de los polígonos, sino que, a través de los escurrimientos superficiales, cuantificar los incrementos en la captación de las Presas Lázaro Cárdenas, Fco. Zarco, Agua Puerca, Yenti, Guadalupe Victoria, El Tigre, Los Naranjos y Tanque aguilereño principalmente.

El proyecto consiste en la aplicación aérea de yoduro de plata, en una solución de acetona, que es liberado en la base de las nubes con humedad presentes en el área del polígono, que detonará un proceso de formación de gotas y liberación de energía que estimula la precipitación en las nubes casi de manera inmediata y con la ventaja adicional de concentrar humedad y dirigir la estimulación a través de la dispersión con trazos aéreos que permiten incrementar y hasta dirigir la cobertura de las precipitaciones de manera controlada.

Para planear y dirigir de la mejor manera los vuelos de estimulación de lluvias, se ha implementado el apoyo meteorológico por personal capacitado y complementado con equipo de radares de la Fuerza Aérea Mexicana, quienes están desde ya, de manera permanente, monitoreando la nubosidad en el área para alertar al equipo técnico sobre cuándo y dónde salir a realizar las aplicaciones del reactivo. Este personal y su infraestructura intentarán también registrar el desarrollo de las nubes, considerando el tiempo y

trayectorias de estimulación para determinar correlaciones de causa efecto observadas.

El proyecto iniciará prácticamente a fines del mes de julio, con el uso de un avión King Air 250 que se apostará en Torreón y de donde partirá a las misiones de estimulación, cuando existan condiciones propicias para la generación de lluvia en el área delimitada en el polígono de trabajo.

Para la evaluación del proyecto, se contará con el apoyo de las instalaciones climatológicas de la Comisión Nacional del Agua, ubicadas dentro del polígono, donde además se instalan pluviómetros adicionales para tener la mayor cobertura posible y cuantificar las precipitaciones generadas en esta superficie.

Se recopilará la información relativa a las entradas de agua en las citadas presas y se analizarán con imágenes de satélite los patrones de humedad que se presenten, como consecuencia de las operaciones de estimulación realizadas.

Se realizará una evaluación del proyecto a través de los aportes de humedad en millones de metros cúbicos, en las áreas beneficiadas de manera directa (áreas dentro del polígono), como indirectas, a través de los ingresos de agua a las presas por los escurrimientos superficiales. Con esta información, se podrá posteriormente inferir el impacto económico.

Cabe destacar que, para considerar como precipitaciones atribuibles al proyecto, se considerarán aquellas que hayan generado láminas de agua con un registro en pluviómetros superior a las pronosticadas a través del sistema de pronóstico europeo.

Finalmente, es necesario destacar también que esta tecnología para estimular precipitaciones no genera ningún daño al medio ambiente, ya que, en las evaluaciones realizadas en el proyecto previo en Ensenada, B.C. durante los meses de febrero y marzo pasados.

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