Problemas de memoria, de percepción y muchas situaciones que afecten a la salud mental y estabilidad emocional, puede provocar el consumo de diferentes sustancias nocivas y el mayor problema en la actualidad, es que ya son consumidas por jóvenes, adolescentes o niños desde los 10 a 12 años de edad.
La salud mental es la encargada de mantener un bienestar o tranquilidad en todos los enfoques de la vida de un ser humano; los entornos familiar, laboral, social, de pareja, sexual y en general en la funcionalidad como seres biopsicosociales, son sostenidos por la salud de nuestra mente, por lo que es fundamental procurarla y darle la importancia debida.
Gerardo Berumen Torres. psicólogo clínico especializado en consumo de sustancias, explicó que toda esta suma va a tener algunas alteraciones a lo largo de la vida de una persona; se tendrán algunas crisis temporales o momentos en los que no se puede estar del todo bien y se van dañando ciertas áreas automáticamente ya sea por cuestiones externas o individuales de cada persona.
El estrés como factor para el uso de sustancias
La salud mental en la actualidad suele verse deteriorada en muchos de los casos en primera instancia por el estrés; las personas hoy en día tienen muchas obligaciones o responsabilidades que cubrir y esto genera crisis de estrés que rebasan en muchos de los casos.
“Muchos de los trastornos por estrés o estrés post traumático hace que los pacientes lleguen a tener problemas físicos; el estrés hoy en día provoca la ansiedad y existen muchos tratamientos farmacológicos, psiquiátricos para aliviar este tipo de padecimientos y sus síntomas a un grado más elevado” comentó.
Como explicó anteriormente el especialista, la parte de la salud mental es primordial para tener un equilibrio, inteligencia emocional y manejo de las emociones, pero en la actualidad el consumo de estupefacientes es una medida que muchos toman como alternativa a los problemas ya sea de estrés o emocionales.
Berumen Torres detalló que puede tratarse de drogas blandas o drogas duras que es como las catalogan; muchas de éstas son elaboradas en laboratorios que incluso son clandestinos y están generando un grave problema de salud pública como con el caso del cristal o las metanfetaminas.
“Ya no solo es la marihuana, la cocaína, heroína o morfina sino otras sustancias que van dañando la bioquímica cerebral como con la producción de dopamina, serotonina, noradrenalina que son los encargados en primera instancia de regular nuestro aspecto emocional; con este desequilibrio podemos tener un mal día sumándole la alteración a todo nuestro sistema y provoca un estado muy complicado”, puntualizó.
Efectos adversos del consumo de drogas
El consumo de estas sustancias produce una alteración en el aspecto físico, generando enfermedades psicosomáticas que por medio de pensamientos intrusivos puedan generarse; colitis, gastritis o incluso algunas más severas. El sistema inmunológico se va a ver atrofiado porque las defensas en lo individual van a ser vulneradas.
“Hay un área del sistema nervioso en nuestro cerebro que es el hipocampo, que si no es estimulada de una manera adecuada, con el uso de algunas de estas drogas como las metanfetaminas, por ejemplo, estarían dañando esta parte que se encarga de la memoria a corto, mediano y largo plazo”, explicó.
Gerardo Berumen, en su experiencia con jóvenes y adultos, así como en el tema de consumo de sustancias, considera que al someterse a este tipo de drogas, tarde o temprano pueden llegar a presentar daño en el área de la percepción, manifestando alucinaciones visuales, auditivas y físicas.
“Después de unos dos o tres meses debería de desintoxicarse automáticamente el efecto secundario de la sustancia, pero a veces los daños pueden ser irreversibles y dañan esta parte muy importante que es el hipocampo; muchos quizá no van a recordar ni que comieron y mucho menos que hicieron hace 15 o 20 días y su etapa de desarrollo se va a ver atrofiada por medio de diferentes áreas”.
Sustancias nocivas impiden el correcto desarrollo
Volviendo al tema de la edad de consumo, el psicólogo advirtió que la formación del cerebro y el desarrollo real de la parte neuronal de cada ser vivo termina hasta los 35 años; si un joven o un pequeño comienza a consumir sustancias tóxicas o estupefacientes, lógicamente estará atrofiando ciertas áreas como el sistema límbico, el desarrollo de emociones, insuficiencia de serotonina que generará aumentos de episodios de estrés y ansiedad.
“Esto es una bomba que luego muchas veces dicen lo hago para rendir, para sentirme mejor, pero el efecto rebote lo hace negativo y tendría que seguir consumiendo; hoy las drogas o estupefacientes tienen elementos aún más adictivos como es el caso del fentanilo”, dijo.
En la actualidad se sabe que esta sustancia es sumamente nociva para el organismo de un ser humano y que no solo genera una rápida y fuerte adicción, sino que puede derivar en graves alteraciones en lo físico, médico y psicológico; genera mayor ansiedad, preocupación porque afecta más en el ámbito emocional y de ese tipo de temas es difícil desprenderse.
Las situaciones emocionales suelen enganchar a los jóvenes con mayor facilidad y son uno de los aspectos por lo que podrían llegar a consumir alguna sustancia adictiva; cuando existe sentimiento ya de por medio, se desfasan muchas cosas y es más complicado salir. El consumo de cualquier tipo de drogas psicoactivas, psicotrópicas tiene como principal objetivo estimular pero el efecto negativo es una sobreestimulación para el cerebro, lo que sin duda repercutirá en daños sobre diferentes áreas del cerebro y afectaciones colaterales.
Otras consecuencias son la pérdida de los controles de impulsos que pueden llegar a desatar agresiones físicas, verbales, pensamientos intrusivos, conductas destructivas, persecución, porque la mente va más allá de lo que es la realidad.