Coahuila. - Durante los últimos dos meses del confinamiento, México ha registrado más de 150 fallecimientos relacionados con el consumo de alcohol adulterado, lo que ha encendido las alarmas en distintos estados del país, situación a la cual Coahuila no ha logrado estar exento, pues en la última semana del mes de mayo ha registrado dos muertes ligadas a este problema.
Las autoridades mexicanas han vinculado el consumo de alcoholes adulterados, principalmente con metanol, a la aprobación de una “ley seca” en varios Estados del país en un intento de contener la expansión del nuevo coronavirus, situación que ha desencadenado un desabasto de cerveza, lo que provocó que varios ciudadanos recurrieran a otras bebidas para remplazar a la cerveza.
¿Qué es el metanol y que daños causa?
El metanol o alcohol metílico es un líquido incoloro, volátil, inflamable, cuyo sabor es muy similar al del etanol, éste último utilizado en las bebidas alcohólicas, con la diferencia que el metanol en el cuerpo humano puede producir la muerte si no se es tratado oportunamente.
Después de la ingesta los síntomas frecuentes son: dolor de cabeza, vértigo, fatiga, náuseas, dolor abdominal, presión arterial baja, convulsiones, visión borrosa y se cae en la inconsciencia.
Existe un riesgo de muerte entre 12 a 36 horas después de la ingestión. El deceso ocurriría por depresión del nivel de conciencia o acidosis metabólica. En caso de que este cuadro se recupere, pueden quedar graves secuelas, como la pérdida de la visión.
El doctor Omar F. Carrasco, jefe del Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mencionó que una vez que el metanol entra al organismo, es metabolizado por una enzima llamada alcohol deshidrogenasa que hace que el metanol se convierta en formaldehído, una sustancia química que sí es tóxica. Posteriormente, este formaldehído se vuelve a metabolizar a través de otro sistema enzimático mediado por la aldehído deshidrogenasa en un metabolito que es mucho más tóxico conocido como ácido fórmico, que provoca alteraciones en el organismo.
Asimismo, El académico de la UNAM menciona que es prácticamente imperceptible al sentido del gusto la diferencia entre el alcohol adulterado y el que no lo es. Es hasta que aparecen los síntomas de toxicidad que es posible saber si se consumió alcohol adulterado, ya que comúnmente suceden de una forma acelerada e inesperada.
