Sus nombres son Geroge Fu Gao y Weifeng Shi y a finales del año 2019 fueron esenciales en la tarea de identificar la enfermedad que paralizaría el mundo en los meses posteriores, la COVID-19. Estos dos científicos chinos han jugado un papel esencial en la pandemia, lo que les ha otorgado un prestigio del que hoy quieren hacer uso para concienciar al mundo de los peligros de una nueva amenaza tras el coronavirus.
Hemos aprendido tanto en el último año sobre el comportamiento de los virus, las mutaciones o el desarrollo de las vacunas que creemos tener la lección aprendida para futuras ocasiones. No obstante, Gao y Shi no ven tan lejana una pandemia que podría llegar tras la Covid, tal y como han expresado en una publicación para la revista Science.
Se trata del virus de la gripe H5N8, del cual se tiene conocimiento en Europa desde hace siete años pero que no ha significado hasta ahora ningún peligro debido a que tan solo tenía efecto en aves. No obstante, el pasado mes de febrero se detectaron en Rusia los primeros humanos infectados con este virus, siete trabajadores de una granja con cerca de un millón de gallinas.
Aunque ninguno de ellos presentó sintomatología, los expertos ponen atención a este hecho pues el patógeno ha sido capaz de instalarse en humanos, por lo que podría, como ya hemos conocido con el coronavirus, desarrollar variantes contagiosas y con graves consecuencias.
Parece que, de momento, el virus no tiene capacidad para afectar a los humanos. La preocupación de Gao y Shi es que pueda evolucionar y descontrolarse, pues la experiencia con los virus de la gripe aviar nos demuestra que pueden afectar a los seres humanos y terminar causando «pandemias desastrosas«.
«Es imperativo que no se ignore la propagación mundial y el riesgo potencial de los virus de gripe aviar H5N8 para las aves de corral, las aves silvestres y para la salud pública global«, expresan ambos. Algunos países asiáticos se han tomado en serio estas advertencias y han ordenado el sacrificio de millones de aves de corral.
