¿Eres una persona ‘friolenta’? Seguramente cuando llegas a casa te resulta imposible entrar en calor y sientas que tu casa se convierte en tu peor enemigo. Muchos hogares suelen ser fríos, en ocasiones hasta con temperaturas inferiores a las que se tienen en el exterior, pero ¿por qué? A continuación te dejamos una serie de razones por las cuales tu casa es tan fría.
Para entender por qué tu casa es tan fría debes tener en cuenta que hay factores que ocasionan estas bajas temperaturas, una puede ser las fugas o ‘entradas’ de aire o hasta la forma en que está hecha la construcción. Por ejemplo, el techo es uno de los aspectos que no se piensa mucho, a menos de que se busque hacer una segunda planta, pero diversos estudios apuntan a que el calor en casa se esfuma por el techo.
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Condensación, la razón de que mi casa sea un congelador
Aunque no lo creas, la condensación tiene mucho que ver en que mueras de frío en tu hogar. Este fenómeno responde al cambio de estado de la materia en forma de gas que pasa a forma líquido. Para librarte de este fenómeno existen herramientas a tu alcance:
- Al cocinar, cubre los recipientes que expulsen vapor
- Tomar duchas cortas y ventilar el cuarto de baño luego de utilizarlo
Hace mucho frío en mi casa ¿Qué hago?
Ahora, ya que sabes algunas de las razones por las cuales tu casa parece un congelador, es hora de comenzar a abordar las diversas soluciones o acciones para evitarlo.
Un deshumidificador de aire: se trata de un aparato que absorbe el aire, lo condensa y acumula en un depósito para vaciarlo, no sin antes pasarlo por una ‘zona caliente’ y así recuperar la temperatura. En pocas palabras, un deshumidificador de aire ‘atrapa el frío’ y lo convierte en caliente, ideal para esta época de frío.
Calefacción y ropa: Otra razón puede ser la gestión de tu calefactor, así como la manera en que te vistes al interior de tu casa. Si llegas muy abrigado de afuera y te desarropas de manera brusca, es probable que sientas más frío que al hacerlo de manera gradual.
Ventanas: Si, sabemos que suele dar pereza hacerlo o siquiera planteárselo, pero uno de los condicionantes más poderosos que explican el frío y la humedad en nuestro hogar es no revisar las ventanas del hogar. Colocar cortinas gruesas o térmicas, así como un doble cristal o ventana ayuda a mitigar estas bajas temperaturas.
Trucos para no congelarte en tu casa
- Cubrir las paredes para mejorar el aislamiento.
- Aislar las tuberías de agua.
- Tomar infusiones calientes (son saludables, digestivas y calientan nuestro organismo mucho más de lo que imaginas).
- Ventilar a primera hora del día y, sobre todo, no pasarse ventilando.
- Siempre que tu situación económica lo permita, utiliza termostatos programables.
- Comer 'caliente' y no solo bebidas. Haz sopas, platos con legumbres y otros guisos de toda la vida que se ingieran 'casi ardiendo'.
- Hacer uso de textiles gruesos: cojines, alfombras, colchas y mantas.
