Una revista especializada detalló el caso de una mujer que tuvo complicaciones médicas por un condón que ingirió después de sostener relaciones sexuales. La publicación National Library of Medicine detalló que en 2004 la paciente llegó al hospital después de que por seis medes padeció de tos, fiebre, así como de mucosidad muy espesa.
La mujer de 27 años fue atendida cuatro meses antes por otros profesionales de la salud, quienes la habían diagnosticado con tuberculosis. A pesar d que recibió tratamiento contra este padecimiento, la mujer de 27 años no presentó mejoría. Los especialistas analizaron las flemas de la mujer para buscar la bacteria mycobacterium tuberculosis con el fin de confirmar que tenía este padecimiento. Sin embargo, el resultado de las pruebas fue negativo.
Después de ello, los médicos sometieron a la paciente a un escáner torácico en el cual fue revelado que la mujer tenía una aparente lesión en el lóbulo superior del pulmón derecho. Al realizar una revisión a detalle del estudio, los médicos descubrieron que se trataba de un objeto, parecido a una bolsa, la cual estaba dentro del cuerpo de la paciente. Por ello, fue sometida a una cirugía para extraerlo.
Aunque el extraño objeto se rompió durante el procedimiento, los médicos lograron extraerlo completamente y descubrieron que se trataba de un condón. Poco después, la mujer y su marido confesaron que poco antes de que comenzaran los síntomas, había sucedido un incidente cuando le practicaban sexo oral.
La mujer detalló que estaba haciendo una felación a su pareja, cuando el condón se escurrió y ella estornudó, por lo cual inhaló el preservativo. Ya que ella no se sintió mal de forma inmediata, no le dio importancia a este suceso. Al final, el condón, aunque no bloqueó sus vías respiratorias, sí acumuló mucosidad y con ello, promovió el crecimiento de infecciones en su cuerpo.
