En la Coahuila hay un sinfín de historias inspiradoras de personas que hacen hasta lo imposible para cumplir sus sueños. Tal es el caso de un joven que renunció a su trabajo para comenzar a construir el camino para alcanzar su meta: convertirse en cantante.
Se trata de Uriel Cerecero quien decidió renunciar a su trabajo en un taller maquinado, lugar en el que ganaba alrededor de cuatro mil pesos a la semana, para perseguir su sueño de ser un gran músico. Sin una estabilidad económica al dejar su empleo, encontró una gran oportunidad en emprender un negocio de gorditas con tan solo mil quinientos pesos.
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Uriel ha ganado su 'clientela' con su puesto ubicado cerca del distribuidor 'El Sarape', en la capital coahuilense, pues ha logrado ganar entre 4,500 y 5,000 pesos a la semana.
Mientras su familia lo apoya en la producción de las gorditas, Uriel invierte su tiempo para dedicarse a su carrera musical como solista.
Bajo el nombre artístico 'Uriel Ces', el cantante ya cuenta con varias canciones de su autoría disponibles en las plataformas de música disponibles.
El puesto de Uriel está cerca del distribuidor 'El Sarape' en Saltillo, Coahuila; está abierto de 9:00 a las 14:00 horas y ofrece las gorditas en 15 pesos cada una.