La geología de México sigue sorprendiendo a científicos y entusiastas de todo el mundo, y uno de los últimos hallazgos que ha llamado la atención es la presencia de volcanes tipo escudo en el estado de Coahuila, específicamente en la Sierra de Santa Rosa y Sabinas.
A unos 6 kilómetros al sureste de Sabinas, en Coahuila, se encuentra la Sierra de Santa Rosa, un rasgo orográfico alargado con una forma peculiar que semeja un anzuelo cuando se observa desde el aire. Lo más asombroso es que en esta área, hace aproximadamente 2 millones de años, surgieron corrientes de lava de una fisura de más de 10 kilómetros de largo. Estas corrientes de lava fluyeron pendiente abajo a lo largo del cauce de un afluente del río Sabinas y llegaron hasta las cercanías de la población homónima.
Lo que hace que estos volcanes sean aún más notables es la forma en que la lava emergió a la superficie. A diferencia de la imagen tradicional de un volcán con un conducto central que expulsa lava, en el caso de la Sierra de Santa Rosa, la lava emergió a lo largo de fisuras alargadas. Este fenómeno, común en otras partes del mundo, como Islandia, es inusual en México.
Estos volcanes, que se apartan de la típica imagen de montañas cónicas con pendientes pronunciadas, podrían haber tenido conos de escoria pequeños cerca de las fisuras, que más tarde fueron erosionados. En la misma región carbonífera de Coahuila, existen otros volcanes, como los cerros Kakanapo Grande, Kakanapo Chico, Agua Dulce, La Peña y El Barril, que son colinas formadas por derrames de lava, con pendientes externas suaves de solo unos pocos grados. Se asemejan a escudos invertidos, y este tipo de volcanes se conoce como "volcanes tipo escudo" en la literatura geológica.
A nivel mundial, los volcanes tipo escudo se encuentran en los océanos, con las islas de Hawái como uno de los ejemplos más conocidos. México también alberga una serie de escudos de lava continentales en una parte del Eje Neovolcánico conocida como el Campo Volcánico Michoacán-Guanajuato. Sin embargo, los ejemplos de Coahuila son notables por sus pendientes externas con ángulos muy bajos y sus características únicas.
En conjunto, los volcanes de la Sierra de Santa Rosa y Sabinas han sido denominados como el "campo volcánico Las Esperanzas". Este descubrimiento ofrece una nueva perspectiva sobre la geología de México y destaca la diversidad y singularidad de los fenómenos geológicos en el país. Los científicos y geólogos continúan investigando esta región para comprender mejor su formación y su importancia en el contexto geológico nacional e internacional.