El matador de toros lagunero Arturo Gilio sigue cosechando triunfos y el sábado pasado no fue la excepción, pues cortó dos orejas en una corrida triunfal celebrada en el Palacio del Arte en la ciudad de Morelia, Michoacán.
Ya con su primer enemigo mostró su carta de intenciones al recibirlo con ‘Verónicas’ suaves y templadas que remató con media. Con la muleta estructuró una faena por ambos lados basada en el aguante ante un toro con poca transmisión. Dejó una estocada trasera que fue suficiente.
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Con su segundo, el hueso del encierro no tuvo opciones por lo que abrevió su labor luego de anunciar que regalaría un toro.
Él, cierra plaza fue un toro que de salida mostró muchas cualidades en su embestida, condiciones que él lagunero aprovechó para desplegar su variedad capotera con ‘Verónicas’ y ‘chicuelinas’ para luego echarse el capote a la espalda en un lúcido quite por gaoneras.
Muleta en mano inició su faena de rodillas en los medios con cambiados por la espalda que prendieron el entusiasmo, ya en pie se dio a torear por derechazos y naturales de extraordinaria factura largas y templados exponiendo el físico al máximo, termina su faena con ‘manoletinas’ de rodillas que le son muy aplaudidas, se va tras la espada para dejar una estocada entera de efectos fulminantes, para cortar dos orejas y salir a hombros acompañado del ganadero y sus alternantes.
