Se presentan como personal de salud y ofrecen supuestas vacunas antirrábicas para perros y gatos: finalmente, sugieren un donativo voluntario. Sin embargo, en realidad son delincuentes, que con la aplicación de la inyección, asesinan cachorritos.

Lo anterior sucedió en Naucalpan, Estado de México, donde Many, una joven mujer, pidió que aplicaran la presunta vacuna a sus 10 mascotas, cinco perros y cinco gatos, los cuáles terminaron todos en urgencias.

Según la declaración de la mujer a UNO TV, los hombres pasaron voceando, y una persona con bata, hielera y un altavoz le dijo que la vacuna era gratuita, por lo que a ella le pareció una grandiosa opción, pero más temprano que tarde, sus mascotas “comenzaron a portarse muy raro”.

El médico veterinario de las mascotas de Many, Antonio Hernández, precisó que los animalitos no eran capaces de coordinar, salivaban, tenían sus pupilas dilatadas, algunos tenían bradicardia, otros taquicardia y fiebre.

Los esfuerzos del especialista permitieron rescatar a ocho de los 10 perros y gatos.

En Nezahualcóyotl, supuestamente las mismas personas se hicieron pasar por personal del Centro de Salud “Aurora”, ahí Luis le puso la vacuna antirrábica a su gato, pero se percató del engaño al solicitar el comprobante de vacunación, que era una nota de remisión.

Acto seguido, su gato “se durmió hasta anochecer” y al despertar se convulsionó y falleció.

A los animales les inyectaron un líquido transparente, cuando la vacuna antirrábica es de color rojo.

El fin de estos delincuentes es el lucrar.