Murió torturado pero las autoridades declararon que había muerto por Covid-19

Al abrir el ataúd vieron el cadáver esposado

Noticias de El Sol de La Laguna

  · jueves 14 de mayo de 2020

Declararon que las condiciones en las que se presentaba el cadáver no son ocasionados por Covid-19. / Foto: Cortesía

La Paz, El Salvador.- Desde el pasado 6 de mayo, el cadáver de Luis Iván “N” fue entregado a sus familiares, a quienes les dijeron que su familiar había muerto por derrame de sangre en el tubo digestivo ocasionado por Covid-19.

Sin embargo, la causa de su muerte no estaba vinculado a la enfermedad como lo mencionó el Instituto de Medicina Legal, según las primeras sospechas de la hermana del sujeto.

De acuerdo a las declaraciones de la hermana a un medio estadounidense, aclaró que al momento de haber reclamado el cuerpo de su hermano, los médicos le comentaron que no debía hacer ningún velorio ni mucho menos abrir el ataúd, pues por la “causa del coronavirus” era peligroso realizar dichas acciones.

No obstante, las recomendaciones del personal médico hizo dudar más a la familia del ahora occiso, pues declararon que un día antes habían visto a Luis Iván completamente sano.

Al momento del entierro, familiares y amigos, dijeron que habían visto el rostro del joven de 30 años con señales de violencia, como golpes en la cara y sus manos estaban esposadas, además su dentadura estaba chueca y sus ojos llenos de sangre.

Sus cercanos decidieron denunciar a pesar del miedo a las represalias, pues esperan que el caso no quedé impune.

Por otro lado, bajo una investigación realizada por el periodista Jorge Beltrán de El Diario Hoy, medio local de aquella ciudad, dijo que Luis Iván ”N” había sido arrestado por sospechas de homicidio en contra de un soldado, donde acompañado de nueve personas más lo detuvieron y esposaron desde el pasado 28 de abril.

Sin embargo, luego de conseguir declaraciones del jefe de policía de La Paz, este mencionó que quizá lo habían esposado en el hospital porque era una medida de prevención de contagio y la justificación de la sangre en los ojos se debía al virus, según declaró el jefe de policía.

Al momento, el caso no ha sido cerrado pues la jueza declaró que los juzgados continúan cerrados por la contingencia.

Finalmente, se señala que por parte de Derechos Humanos en El Salvador se busca hacer justicia, ya que las condiciones en las que se presenta el cuerpo no son las mismas por las que una persona con Covid-19 muere.