Panamá.- Ante las circunstancias en las que algunos alumnos se encuentran debido a la pandemia y ante la escasez de internet que hay en las comunidades, algunos maestros deciden llevar la escuela hasta los lugares más lejanos, dejando ver su pasión por la educación.
La maestra Graciela Bouche acompañada de Melanie, quien maneja la canoa, viajan por el río Chagres topando con el canal Panamá para llevar las clases a comunidades infigenas.
Su trayecto demora 15 minutos, desembarcando en el puerto de Ella Puru, y bajando de la canoa la pizarra, laptop y algunos alimentos que comparte con sus alumnos.
Graciela va una vez a la semana para poder llevar el material y las clases a sus alumnos, siendo casi un total de 30 estudiantes de diferentes grados, por lo que se pone de acuerdo con los maestros de los demás alumnos para poder llevar las actividades.
Para el mediodía, la maestra termina las sesiones escolares, donde realiza también video llamadas con los demás profesores y ayuda a que sus alumnos entreguen las tareas a sus maestros.
De acuerdo a Graciela, espera que la comunidad tenga pronto una escuela dentro de la localidad, para que, una vez terminada la pandemia, los estudiantes no viajen tan lejos y con una diferencia de 40 minutos hasta llegar a su escuela.
au