Torreón, Coahuila. – Comarca Lagunera.- Ante la presión de cumplir con traslados en el menor tiempo posible, exigido por los empresarios, cada vez son más los operarios del transporte de carga que se ven ‘orillados’ a una drogadicción forzada, para poder mantenerse activos hasta por 35 horas consecutivas en carretera, mencionando Carlos García Álvarez, Vicepresidente de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas AC (AMOTAC), que representan un grupo cada vez más vulnerable, por lo que piden que haya flexibilidad en cuanto a los tiempos de traslado y mejores condiciones de seguridad para todos ellos.

“Estamos siendo objeto de una drogadicción forzada, estamos pidiendo al empresario que nos dé tiempos, que haya paradores seguros para poder descansar, no estamos de acuerdo en una drogadicción, porque el estar de acuerdo, es querer matar a nuestros operadores, prácticamente somos un transporte exprés y si ven las carreteras, andamos como locos, pero no porque nos gusta la velocidad, sino por la exigencia del empresario, hay veces que encontramos un retén y perdemos cinco o seis horas y luego tenemos que hacer de todo para recuperar ese tiempo”, mencionó al respecto.

El dirigente de la AMOTAC, expuso como ejemplo un viaje de la Ciudad de México a Tijuana, en el que tienen que hacer 35 horas “y no estoy exagerando, yo quisiera ver un automóvil particular, no en un camión, quién te hace las 35 horas, y luego son las excusas para que el día de mañana no nos paguen el flete, que, porque se perdió la cita, que por una cosa o por otra, nosotros sí queremos cumplir porque es nuestra fuente de trabajo”.

García Álvarez agregó que, al referirse a una drogadicción forzada, no está hablando solamente de cuestiones toxicológicas, sino de otras cuestiones como el tomar un café o un energizante, productos que también alteran a los operadores y que provocan que en cada viaje enfrenten un alto nivel de estrés: “hay muchas cosas que nos alteran, como el venir manejando esperando que nos salga un policía, que a veces nos va a extorsionar, eso también altera y lo único que estamos pidiendo es que nos tomen en cuenta y nos permitan trabajar en mejores condiciones, tanto de salud, emocional y de seguridad”.