/ martes 24 de diciembre de 2019

El Nacimiento Navideño: elemento característico de la época 

Tradición que data del año 1223, iniciada por San Francisco de Asís

Torreón, Coahuila. - La magia de la época más esperada por muchos nace principalmente por las decoraciones y el ‘nacimiento navideño’ es una tradición muy usada en las culturas latinoamericanas, un elemento clave de la navidad, pues representa la llegada del niño Jesús al mundo.

Fue San Francisco de Asís, cuando en 1223 inició la tradición, pues representó el nacimiento de Jesús, según la historia, en su granja recreó el acontecimiento con ayuda de algunos pobladores que representaron a María, José, el niño, y los pastores. Luego de esto se fue popularizando en las iglesias, hasta formar parte de una decoración esencial de temporada.

Antonio Aranda Cepeda, 44 años dedicado a la venta de figuras en el Mercadito Navideño de Torreón, detalló que los elementos indispensables con los que debe contar un nacimiento navideño, son: un pesebre, el niño Jesús, José, María, el ángel, los tres reyes magos, el toro y la mula, con esto ya se formaría un nacimiento sencillo.

Para un nacimiento más completo, se incluyen pastores, pescadores, panaderos, mujeres lavando; que simbolizan el pueblo de Belem, lugar donde nació Jesús, borregos, gallinas, ranas y un sinfín de animalitos que significan la nobleza y docilidad y todos ellos en una posición viendo hacia el portal. El diablo se pone junto a una figura de un ermitaño, lo más alejado del pesebre, representa la tentación que los humanos pasamos día a día, manifestó Aranda Cepeda.

Existen figuras de diferentes tamaños, hay desde las que ellos llaman de “dos dedos”, que son aproximadamente de tres centímetros hasta dos metros de altura, por ejemplo, un pastor chico de resina cuesta 38 pesos, señaló que antiguamente las figuras eran de 30 a 40 centímetros hechas en barro, ahora hay mucha variedad, son de yeso, pasta, y resina.

Respecto a los tamaños de niño Jesús, mencionó que hay de 8, 10, 12, 15, 20, 25, 30, 35, 40 y 60 centímetros hasta un metro, el que más compran es el de 30 a 120 pesos, el de 60 hecho en pasta cuesta 280 pesos.

En el local con el número 34 con ‘Toño Aranda’, podrá encontrar un sinfín de figuras para armar un buen nacimiento navideño, aunque también venden algunos ya armados, que incluye un el portal, el niño Jesús, ángel, José, María, tres reyes, cuatro pastores, el buey y la mula por 450 pesos.

Por otra parte, el pesebre es muy importante, pues es el lugar donde nació el niño Jesús, la señora Ignacia Flores de Colunga, con 30 años dedicándose a la elaboración y venta de pesebres en el Mercadito Navideño, explicó que hay de distintos estilos, materiales y tamaños.

Hay de tronco y corteza de madera, el más chiquito es para un misterio de ocho centímetros cuesta 40 pesos, pero también hay para de 20, 35, 55 centímetros, su precio oscila entre los 150 y 300 pesos, hasta para los más grandes que son de un metro con un valor de 600 pesos.

Al pesebre se le agrega, musgo, heno, paja, gobernadora, zacate falso, para adornarlo, así como distintos tipos de papel roca para simular o crear las montañas, así como pales con dibujos de paisajes.

Desde hace aproximadamente cinco años existen nuevas tendencias en la creación de los pesebres, explicó la señora Ignacia Flores, pues algunos incluyen fuentes eléctricas que mantienen el agua en movimiento, así como luces integradas que cuestan cerca de mil pesos.

Torreón, Coahuila. - La magia de la época más esperada por muchos nace principalmente por las decoraciones y el ‘nacimiento navideño’ es una tradición muy usada en las culturas latinoamericanas, un elemento clave de la navidad, pues representa la llegada del niño Jesús al mundo.

Fue San Francisco de Asís, cuando en 1223 inició la tradición, pues representó el nacimiento de Jesús, según la historia, en su granja recreó el acontecimiento con ayuda de algunos pobladores que representaron a María, José, el niño, y los pastores. Luego de esto se fue popularizando en las iglesias, hasta formar parte de una decoración esencial de temporada.

Antonio Aranda Cepeda, 44 años dedicado a la venta de figuras en el Mercadito Navideño de Torreón, detalló que los elementos indispensables con los que debe contar un nacimiento navideño, son: un pesebre, el niño Jesús, José, María, el ángel, los tres reyes magos, el toro y la mula, con esto ya se formaría un nacimiento sencillo.

Para un nacimiento más completo, se incluyen pastores, pescadores, panaderos, mujeres lavando; que simbolizan el pueblo de Belem, lugar donde nació Jesús, borregos, gallinas, ranas y un sinfín de animalitos que significan la nobleza y docilidad y todos ellos en una posición viendo hacia el portal. El diablo se pone junto a una figura de un ermitaño, lo más alejado del pesebre, representa la tentación que los humanos pasamos día a día, manifestó Aranda Cepeda.

Existen figuras de diferentes tamaños, hay desde las que ellos llaman de “dos dedos”, que son aproximadamente de tres centímetros hasta dos metros de altura, por ejemplo, un pastor chico de resina cuesta 38 pesos, señaló que antiguamente las figuras eran de 30 a 40 centímetros hechas en barro, ahora hay mucha variedad, son de yeso, pasta, y resina.

Respecto a los tamaños de niño Jesús, mencionó que hay de 8, 10, 12, 15, 20, 25, 30, 35, 40 y 60 centímetros hasta un metro, el que más compran es el de 30 a 120 pesos, el de 60 hecho en pasta cuesta 280 pesos.

En el local con el número 34 con ‘Toño Aranda’, podrá encontrar un sinfín de figuras para armar un buen nacimiento navideño, aunque también venden algunos ya armados, que incluye un el portal, el niño Jesús, ángel, José, María, tres reyes, cuatro pastores, el buey y la mula por 450 pesos.

Por otra parte, el pesebre es muy importante, pues es el lugar donde nació el niño Jesús, la señora Ignacia Flores de Colunga, con 30 años dedicándose a la elaboración y venta de pesebres en el Mercadito Navideño, explicó que hay de distintos estilos, materiales y tamaños.

Hay de tronco y corteza de madera, el más chiquito es para un misterio de ocho centímetros cuesta 40 pesos, pero también hay para de 20, 35, 55 centímetros, su precio oscila entre los 150 y 300 pesos, hasta para los más grandes que son de un metro con un valor de 600 pesos.

Al pesebre se le agrega, musgo, heno, paja, gobernadora, zacate falso, para adornarlo, así como distintos tipos de papel roca para simular o crear las montañas, así como pales con dibujos de paisajes.

Desde hace aproximadamente cinco años existen nuevas tendencias en la creación de los pesebres, explicó la señora Ignacia Flores, pues algunos incluyen fuentes eléctricas que mantienen el agua en movimiento, así como luces integradas que cuestan cerca de mil pesos.

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