Torreón, Coahuila.- Como un homenaje póstumo a un lagunero que se destacó por su impulso a favor de la creación y sostenimiento de diversos espacios educativos y culturales, se dedicó el tradicional altar de muertos que se confeccionó en el Museo del Algodón a la memoria del conocido empresario Ramón Iriarte Maisterrena.
Ante la presencia de grupos de estudiantes, funcionarios públicos y representantes del Club Rotario, sin faltar la presencia de los familiares del homenajeado encabezados por su viuda, la señora Josie Reynoard de Iriarte, la formal presentación del altar la presidió el alcalde Jorge Zermeño Infante, quien se refirió a Don Ramón como un lagunero que dejó mucha huella en la Comarca Lagunera.
Hizo notar que precisamente el Museo del Algodón, localizado en el extremo poniente de la ciudad justo en lo que fue el antiguo rancho del Torreón, es sólo parte del legado que dejó el empresario.
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Recordó que además de respaldar solidariamente la construcción de nuevos centros educativos, entre estos una escuela que se inauguró hace apenas unos meses, Iriarte Maisterrena siempre se preocupó por participar en los patronatos que han auspiciado la fundación y sostenimiento de distintos centros museográficos.
Por tanto, consideró muy justo que se haya dedicado a él este altar que es parte de las manifestaciones propias de la cultura mexicana que suelen ponerse de manifiesto cada año con motivo de la celebración del Día de Muertos.
