Gómez Palacio, Durango.- Luego de una publicación en Facebook, por parte de una persona de nombre Nayeli, en la que se aseguraba que en la Casa de Bendición Jireh, ubicada en la colonia Bellavista de Gómez Palacio, se agredía físicamente y se daba un mal trato a los ancianos que ahí habitan, la directora del lugar, Blanca Estela Ayala, desmintió la situación, comentando que por más de 20 años se ha brindado una atención humana y de calidad a los adultos mayores, situación que se confirmó a través del testimonio de los propios inquilinos.
“Ayer (miércoles) tuvimos una situación con una persona que vino a traerles alimento y subió a la parte superior, donde hay una persona que está con demencia senil, después se retiró y ya en la noche me doy cuenta que puso una publicación en Facebook, donde asegura que aquí se golpea a los adultos mayores y que viven en una situación no apta para ellos, algo que es falso totalmente”, expuso Blanca Estela.
Luego de los sucedido, la directora no ha querido contactar a Nayeli, mencionando que ella se retractó y retiró la publicación, pero después puso otra donde menciona que lo único que quiere es ayudar al señor Ramón, que es quien padece demencia senil y es a quien se refirió que sufría maltrato, situación que desmiente completamente, comentando incluso, que familiares de los ancianos que cuidan, preguntaron qué estaba sucediendo, si ellos saben de antemano que en ese lugar se les trata bien.
“Aquí nos tratan muy bien, no nos golpean, nos dan nuestros alimentos tres o cuatro veces al día, yo llevo aquí más de un año y siempre me han dado buen trato, me dan mi medicamento, son mentiras lo que están diciendo”, comentó la señora María Guadalupe, quien recibe atención en la mencionada casa.
“Yo estoy muy a gusto aquí, no nos maltratan, es un mal entendido todo lo que se está diciendo por esta muchacha, aquí nos cuidan, nos dan de comer tres veces al día, nos dan medicina, yo estoy muy agradecida, son calumnias lo que se ha dicho, Blanquita es muy buena señora”, fue el testimonio de la señora María del Refugio, que también recibe cuidados en dicho lugar.
