Torreón, Coahuila.- El proceso de regularización de vehículos de procedencia extranjero más que un impacto negativo traerá consigo beneficios para el mercado de autos usados y propiciará condiciones de reactivación económica, además de que será una fuente de recursos para la realización de obras en materia de pavimento, opinó el presidente del Consejo Lagunero de la Iniciativa Privada (CLIP), José Luis Hotema de Santiago.
Indicó que, por principio, tras la emisión del decreto para la regularización de los llamados autos “chocolates” en 10 estados de la República, entre estos Coahuila, no se ha advertido ninguna repercusión en perjuicio del sector automotriz.
No negó que dicho proceso en un momento dado la medida le “pegará” a la venta de unidades nuevas en un mercado en el que; sin embargo, ahí la principal preocupación en la actualidad es el freno en la producción derivada del prevaleciente desabasto de los microprocesadores electrónicos, componente indispensable para el funcionamiento de los vehículos.
Se refirió a que debido a la falta de los también llamados microchips no hay ahora suficientes vehículos en las agencias distribuidoras de automóviles de las distintas marcas, y eso constituye por ahora la principal problemática que con prioridad debe buscarse resolver, lo cual se espera comience a darse antes de que concluya el primer trimestre del año en curso.
Precisamente a favor de que dicha problemática pueda comenzar a aliviarse se espera que pueda concretarse la instalación de dos nuevas plantas productoras de microprocesadores, una en San Antonio, Texas y la otra en México.
Respecto a la regularización de vehículos “chuecos”, el presidente del CLIP dijo de manera puntual que “más que una problemática, viéndolo positivamente habrá una reactivación económica para los estados que participan en este proceso, además de que van a permear recursos para obras de pavimentación”.
