En junio, la actividad económica en México registró un alza anual de 0.9 por ciento, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El impulso en la economía provino principalmente de las actividades terciarias, que están relacionadas al comercio, servicios y turismo, las cuales registraron un crecimiento de 1.6 por ciento.
Al presentar el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), correspondiente a junio, el Inegi abundó que por el lado del sector secundario, asociado a las industrias, se tuvo una ligera baja de 0.1 por ciento.
El IOAE es elaborado por el Inegi y permite conocer la evolución del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) apenas tres semanas después de que terminó el mes de referencia.
De cumplirse las proyecciones del organismo, la actividad económica del país registrará una desaceleración, pues en mayo se proyectó un repunte de 1.2 por ciento anual.
Según estimaciones de Banco BASE, bajo las previsiones actuales el Producto Interno Bruto (PIB) del país podría crecer a una tasa de 0.12 por ciento trimestral y 1.21 por ciento en su comparación anual.
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Desde inicios de año, diversos analistas financieros advirtieron que la economía mexicana podría debilitarse ante una desaceleración de Estados Unidos.
Para Grupo Financiero Banorte, algunos de los retos que podrían observarse durante el segundo semestre del año están relacionados a la inflación, volatilidad en los mercados y resultados del proceso electoral en Estados Unidos, que podría marcar el rumbo de una nueva política comercial
