Cálculos matemáticos de investigadores de la Universidad de Granada (UGR) permitieron conocer que 20 niños en un salón de clases suponen que cada uno habría tenido contacto cruzado con 74 personas en un solo día.

El estudio de la mencionada institución académica toma como punto de partida la suposición de que cada familia media española está conformada por dos adultos y 1.5 hijos menores, es decir, de los 20 niños en clase, una mitad tiene hermanos y la otra no.

Desde el primer día de clase, cada alumno estará expuesto a 74 personas, esto en el presunto de que no hay ningún otro roce con alguien ajeno a la familia y el hogar.

En el segundo día, explicó Alberto Aragón, coordinador del proyecto, la interacción alcanzaría las 808 personas, considerando solo las relaciones sin distanciamiento ni mascarilla de la clase propia y de las clases de hermanos y hermanas.

En caso de que el número de alumnos subiera a 25, como muchas escuelas en España coinciden es el promedio, el número de implicados sería de 91 el primer día y de 1,228 el segundo.

“El contagio de una persona de ese colectivo conlleva un riesgo automático para todo el grupo, por lo que cabe esperar que cualquier situación de alerta lleve consigo el cierre del grupo o incluso de todo el colegio si han compartido espacios o docentes comunes”, escribió Javier Arroyo, periodista de El País.

En España, “se ha puesto mucho énfasis en el objetivo de abrir las aulas en septiembre, pero faltan todos los otros componente de una buena planificación”, dijo Alberto Aragón.

Actualmente, el Ministerio de Educación del mencionado país anunció que no se consideraba el uso de mascarillas ni el mantenimiento de una distancia física mínima en cursos de Primaria.