Continúan las especulaciones en torno a la salud de Vladimir Putin, presidente de Rusia desde 2012. Los rumores se deben ahora a la reaparición de un video en el que, de acuerdo con imágenes difundidas por el periodista Mike Sington, las piernas del mandatario ruso tiemblan sin control durante el desarrollo de la citada ceremonia.
Los medios de comunicación, basados en fuentes cercanas al gobierno, han señalado que Putin, de 69 años, “habría recibido diagnósticos de Parkinson, demencia o cáncer en el estómago, sangre y tiroides”, especulaciones que el Kremlin ha desmentido una y otra vez.
Lo más reciente ocurrió, al parecer, durante la ceremonia en la que Putin entregó el Premio Estatal de la Federación Rusa a Nikita Mikhailov, el cineasta que en el pasado quiso ser presidente de Rusia. En el acto de premiación efectuado en el Kremlin, algunos comunicadores afirman haber visto incómodo al presidente, con dificultades para mantenerse en pie.
Se trata de la historia de siempre: se invita a los periodistas para dar cobertura a determinado evento y, en el afán de lograr mayor audiencia mediante el sensacionalismo, optan por destacar aspectos que nada tienen que ver con los contenidos dados a conocer en la rueda de prensa.
Algo similar sucedió en México durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, de quien se dijo en diversas ocasiones que estaba enfermo. Y mire usted, a pesar de que la ley protege los datos personales de cualquier persona, incluidos los del primer mandatario de la nación, una organización defensora de la libertad de expresión y el derecho a la información solicitó tener acceso al expediente clínico del entonces presidente de la República.
Diversas voces, entre ellas la del hoy primer mandatario de la nación, solicitaron en ese tiempo la renuncia de Peña Nieto a la Presidencia. Esto tuiteó Andrés Manuel López Obrador el 5 de junio de 2014: “Existe el rumor de que EPN está enfermo. Ni lo creo, ni lo deseo. Pero es una buena salida para su renuncia por su evidente incapacidad”.
El vocero del gobierno de EPN, Eduardo Sánchez, respondió de inmediato en Twitter, afirmando que "el presidente Enrique Peña Nieto goza de cabal salud". Pese a la anterior información, que desmentía los rumores sobre la salud del presidente, los medios de comunicación sensacionalistas insistieron, sin presentar ninguna prueba de que el mexiquense padecía cáncer de próstata, como afirmaban diversos periodistas.
Lo cierto es que sí ha habido mandatarios que en México han renunciado a su cargo por motivos de salud. Uno de ellos, el priísta michoacano Fausto Vallejo Figueroa, quien el 18 de junio de 2014 renunció al cargo de gobernador en la entidad de Michoacán, para atender su salud.
Retomando el tema de Putin y sus supuestos problemas de salud, conviene mencionar que hace algunas semanas Sergei Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, negó oficialmente que el líder ruso padezca alguna enfermedad grave: “Nadie, en su sano juicio, puede observar la menor señal de [que Putin adolezca de] algún tipo de enfermedad o padecimiento”, señaló el canciller ruso.
Lo demás son sólo rumores, especulaciones dañinas que confunden y distorsionan la quietud y la tranquilidad de la población rusa, que tiene ante sí otros problemas, como el anhelo de que sus autoridades pongan fin a la desgastante guerra contra Ucrania, uno de los seis conflictos armados que están ocurriendo hoy por hoy en el mundo.
Twitter: @armayacastro
